Ourense nombra hija predilecta a Marisa Crespo, la cardióloga de referencia mundial que sigue teniendo su paraíso en Cea

Uxía Carrera Fernández
UXÍA CARRERA OURENSE / LA VOZ

OURENSE

La Diputación otorgó el título a la reconocida doctora, que destacó la importancia en su carrera de su familia y su tierra natal

06 jul 2024 . Actualizado a las 17:11 h.

La doctora Crespo Leiro fue durante unas horas más bien solo Marisa, la niña nacida en la aldea de Santrós, en San Cristovo de Cea, que estudió en las Carmelitas de Ourense y se fue a Santiago para romper la tradición familiar de maestros y hacerse médica. Se convirtió en una de las mejores cardiólogas del mundo y es la jefa de la Sección de Insuficiencia Cardíaca del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña. A su excelente currículo se le une el título de profeta de su tierra natal. Por eso, la Diputación le entregó este sábado el reconocimiento de hija predilecta de la provincia de Ourense

El Centro Cultural Marcos Valcárcel se llenó para atender a la mesa presidida por Marisa Crespo Leiro, el presidente de la Diputación de Ourense, Luis Menor, y el conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez. El encargado de presentar a la figura de Crespo Leiro fue el ourensano José Manuel Vázquez, jefe de Cardioloxía del CHUAC. Rememoró desde la pequeña escuela rural de los años 60 en la que comenzó a formarse Marisa —«donde non era posible adiviñar que ía a estudar Medicina»—, pasando por las 18 matrículas de honor con las que terminó la licenciatura en la USC hasta el premio extraordinario de su doctorado. En su amplia experiencia, Marisa Crespo se especializó en cardiología en hospitales de Madrid o Toledo y cruzó el charco para investigar en Nueva York, Standfor o Chicago. 

Sus primeros años como médica coincidieron con los primeros trasplantes cardíacos y fue una de las profesionales que conformó el servicio de cardiología del entonces hospital Juan Canalejo de A Coruña. Está al frente de la Sección de Insuficiencia Cardíaca, lo que compagina con la docencia y la investigación, campo en el que realizó más de 500 publicaciones. El cardiólogo apuntó que solo su excelente carrera como médica sería suficiente para ser hija predilecta, pero Crespo Leiro también se define por su «sentimento de pertenza profundamente ourensano e orgulloso da súa terra». A nivel personal, ostenta una «extensa rede de amigos reais» y, por experiencia propia, Vázquez apuntó que destaca por su habilidad para forzar grandes amistades.

Una ourensana del rural que llegó a la élite: «Nada de lo que soy podría ser sin mi Galicia y mi pueblo»

Marisa Crespo agradeció emocionada el reconocimiento de hija predilecta, que reúne los conceptos que, junto a la Medicina, sintetizan su vida: «terra, familia e filla». En su discurso dio especial importancia a la influencia que tuvo en ella la entrega de sus padres. Su madre fue maestra, de hecho, la escuela del pueblo llegó a estar en su casa, aunque sus lecciones iban más allá de las aulas. Su padre fue maderero industrial y no pudo tener estudios superiores pero le brindó la enseñanza de los valores. También quiso mencionar a su tío, su hermana o sus sobrinos, presentes en el acto. 

Además de la familia, la cardióloga reconoció que su vida ha estado condicionada por «ser ourensana e galega». Su parroquia y su pueblo fueron fundamentales para conformarse como persona: «Sé que hay muchos lugares maravillosos pero agradezco a Dios que me haya hecho nacer en Santrós». Pese a vivir en A Coruña y moverse por todo el mundo, su aldea de San Cristovo de Cea sigue siendo su «paraíso», donde renueva energía. «Nada de lo que soy podría ser sin mi Galicia y mi pueblo», sentenció. Este fuerte vínculo ya la hizo recibir también el título de hija predilecta del concello de Cea.

Crespo recordó que en la escuela del pueblo comenzó a amar el aprendizaje y que en Carmelitas interiorizó la disciplina y el trabajo. Sus compañeras de dormitorio y tres monjas fueron parte del público este sábado. Desde que se fue de Ourense, defendió que no había mejor ciudad que Santiago para estudiar Medicina y que su experiencia posterior en Madrid fue «providencial». Después, «como no podía ser de otra manera», volvió a Galicia, al servicio de trasplante de A Coruña. Lleva en el CHUAC 31 años en los que una de las mayores lecciones que se lleva es cuidar de todo el equipo, por aparentemente sencilla que sea la tarea de cualquiera de sus miembros. Destacó de la provincia de Ourense su alta tasa de donación de órganos: «Somos bos e xenerosos». 

La médica nació en una provincia que, con sus agua termales, «es un lugar sanador, propicio para curar la enfermedad». Y quizás eso la marcó para destinar su vida a los pacientes. Relató en su discurso que Ourense, que fue denominada como la Atenas gallega, la cargó de determinación y la Medicina le enseñó a empatizar con el que sufre. Así se ha convertido en la mujer que es, este sábado especialmente afortunada y rodeada de cariño.

El presidente de la Diputación, Luis Menor, el conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez, y la diputada ourensana Patricia Torres dirigieron unas palabras a la recién nombrada hija predilecta destacando la unanimidad en otorgarle este título. Acudieron al acto, además de familiares y amigos de Marisa Crespo, el presidente del Parlamento de Galicia, Miguel Santalices, el alcalde de Cea, José Luis Valladares así como otros representantes públicos.