Se negó a soplar ante los agentes, pero su aliento a alcohol y sus problemas para caminar derecho han sido suficientes para condenarlo por un delito vial

La Voz OURENSE / LA VOZ

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Un guardia civil realiza una prueba rápida de alcohol a un conductor en el corredor de Monforte.
Un guardia civil realiza una prueba rápida de alcohol a un conductor en el corredor de Monforte. ALBERTO LÓPEZ

El conductor, con otra condena previa, ha sido castigado con seis meses de prisión y trabajos comunitarios

29 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Seis meses de cárcel, 61 días de trabajos en beneficio de la comunidad y 366 días sin el carné. Estas son las consecuencias que tendrá que afrontar un conductor que, tras sufrir un accidente de tráfico, se negó a realizar la prueba de alcoholemia. Se le condena por esa decisión, pero a la vez afrontará reproche penal por haber circulado bajo los efectos del alcohol, ya que en el atestado los agentes de la Guardia Civil hicieron constar síntomas que demostraban que había bebido antes de subirse a su coche.

Todo se remonta a la madrugada del 17 de diciembre del 2021. El acusado se salió de la carretera cuando iba por la N-541, a la altura de O Carballiño. Cuando llegaron los uniformados sospecharon enseguida de su estado de embriaguez. Así, describieron en su informe su «rostro enrojecido», el «habla pastosa», la «halitosis alcohólica notoria a distancia» y una «incapacidad para caminar en línea recta». Lo denunciaron por dos delitos viales, que ahora quedan probados. El conductor ya había sido condenado, por hechos similares, en el año 2021.