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La exportación de pizarra cayó casi un 6 % el año pasado para quedarse en 411.840 toneladas

María Cobas Vázquez
m. cobas O BARCO / LA VOZ

CARBALLEDA DE VALDEORRAS

Foto de archivo de jaulas de pizarra.
Foto de archivo de jaulas de pizarra. LOLITA VAZQUEZ

La facturación se cerró en 366 millones, diez menos que en el 2023

19 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

La exportación de pizarra (el 95 % de la producción se vende fuera de España) cayó un 6 % el año pasado respecto al 2023. A lo largo del 2024 los mercados extranjeros compraron 411.840,2 toneladas de la piedra natural, lo que supone un 5,8 % menos que doce meses antes (cuando la cifra se cerró en 437.186 toneladas). Es el balance oficial que maneja el Clúster da Pizarra en base exclusivamente a datos de comercio declarado proporcionados por el departamento de aduanas de la Agencia Tributaria. Los motivos son varios y fueron sucediendo a lo largo del año.

Todo comenzó con un invierno y una primavera con muy mala meteorología, lo que impidió que se realizasen trabajos de construcción al aire libre. Eso supuso un importante revés para la venta de un producto cuyo principal destino son las cubiertas. Las intensas lluvias de la primera mitad del 2024 se unieron al parón de la construcción que sufre Europa, donde están los principales mercados, y la falta de mano de obra cualificada, un caldo de cultivo perfecto para frenar las ventas. A todo lo anterior se sumó además la competencia de países productores que venden más barato. China y Brasil están produciendo pizarra en grandes cantidades.

En lo que se refiere al balance por países, en Francia la caída fue todavía más grande que en la media global y llegó al 7,2 % respecto al 2023, para quedarse en 196.580 toneladas. Es el principal comprador de pizarra gallega, seguido del Reino Unido, donde la bajada fue del 6,9 % para quedar en 112.365 toneladas. El tercer importador, Alemania, registró la tendencia contraria. Las ventas a ese país subieron un 6,6 % para situarse en 41.128 toneladas. Bélgica, cuarto mercado, también registró un descenso cercano al 7 % (16.085 toneladas). Estados Unidos se consolidó como el quinto país que más pizarra demanda. Sigue una tendencia iniciada hace varios años, aunque lo cierto es que no se cumplieron las expectativas. «Nos últimos catro anos medrou de maneira importante, pero este ano non o fixo como se agardaba», reconoce Severino González, gerente del clúster. La mala meteorología de los primeros meses del año y las elecciones presidenciales serían los principales motivos de esta desaceleración. Las ventas al país que dirige Donald Trump cayeron más del 12 % para quedarse en poco más de 10.300 toneladas. En todo caso, se mantiene como un mercado emergente en el que el sector tiene los ojos puestos.

La caída de la facturación no fue tan acusada como la de toneladas vendidas porque subió el precio. Fue una situación enmarcada en un contexto general de subida del coste de los materiales y en un intento por repercutir el incremento en el precio de la propia producción. La tonelada exportada se pagó a una media de 889 euros, lo que supone un incremento del 3,2 % respecto al 2023 y la facturación final fue de 366 millones (diez menos que el año anterior).

Es pronto para hablar de cómo será el 2025. «Non se sabe porque estamos en pleno inverno, pero esperamos como mínimo exportar o mesmo que o ano pasado», avanza el gerente del Clúster da Pizarra.