El escultor Ramón Conde inauguró el conjunto que ideó para la trasera de la Casa Consistorial, con mensjae a los políticos: «É a imaxe dun home fiable e confiable»
01 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Lo primero que se le pide a los políticos es que sean personas de fiar, que generen confianza entre la gente. No todos lo consiguen, desde luego, aunque siempre tratan de transmitir esa impresión. Desde ahora, la clase política pontevedresa tiene una fuente de inspiración: el Fiel Contraste, el conjunto escultórico que ayer se inauguró en la parte trasera de la Casa Consistorial, en la calle de la Alhóndiga.
Y es que el propio autor de la obra, el reconocido escultor Ramón Conde, afirmó en el acto de inauguración, en presencia del alcalde y de la teniente de alcalde, que con el Fiel Contraste quiso simbolizar «a forza tranquila e a autoridade dun home fiable e confiable». No podría encontrase algo más adecuado para adornar el centro de la decisión política municipal.
La propia teniente de alcalde, Teresa Casal, que fue la que encargó la obra, no se abstrajo de este espíritu y advirtió que el Fiel Contraste «é unha necesaria metáfora da rexeneración da política, que ao igual que o labor deste funcionario medieval, debe exercerse con limpeza e honradez».
Dar fe de los pesos y medidas
Pero ¿quién o qué era ese Fiel Contraste que Ramón Conde ha representado en una imponente figura de bronce de 300 kilos de peso y 1,93 metros de altura, con un brazo extendido sosteniendo una balanza? El archivero municipal, Enrique Sotelo, se encargó de ilustrar a los presentes: «Era o responsable oficial de dar fe dos pesos medidas -indicó-. Chamado tamén almotacén e fiel medidor, intervía como garante das transaccións comerciais para o que se valía de pesas, medidas de pao e unidades de patrón, procedendo a selar as en garantía de fidelidade ou fieldade».
En los archivos del Concello se conservan documentos alusivos al fiel contraste que se remontan al año 1598. Sotelo subrayó que la toponimia pontevedresa ofrece nombres como «rúa do Peso da Fariña, actualmente Sor Lucía», que podría indicar el antiguo emplazamiento en esa zona de la alhóndiga, almacén municipal para el depósito y compra y venta de grano, comestibles y mercancías. A mediados del siglo XVI, recordó, la alhóndiga pasó a ubicarse en la planta baja de la Casa do Concello, «situación que se prolongou tanto como oficio. Esta desaparición chegou coa unificación de pesos e medidas propiciado pola administración borbónica, coa aparición do sistema métrico decimal e, finalmente, coa construción da actual Casa do Concello en 1880».
Hoy en día, Alhóndiga es el nombre que recibe, precisamente, la calle a la que se abre la parte trasera de la Casa Consistorial, una zona cuya restauración culminó ayer con la inauguración del conjunto escultórico de Ramón Conde.
El autor quiso destacar «a importancia de recuperar a memoria histórica das nosas tradicións e señas de identidade». Él lo reflejó en el Fiel Contraste, un conjunto que además de la pieza principal recrea, a modo de sombras realizadas en acero córtem, escenas cotidianas de un mercado cualquiera.