«Leopoldo Nóvoa fue un ilustre cliente de nuestra imprenta»

Elena Larriba García
Elena Larriba PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

05 mar 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Celestino Peón Gómez

77 años

Impresor

La plaza del Teucro, donde se ubica la Imprenta C. Peón desde hace 110 años

Hace 110 años -se cumplieron el pasado 2 de enero- Celestino Peón Villar fundó la Imprenta C. Peón en la esquina de la Plaza de O Teucro con la calle Princesa. A su muerte, la heredó su hijo Olegario y actualmente la regentan sus nietos, Celestino y Juan Antonio. Son la tercera generación de una saga familiar de impresores muy ligada a la historia y a las tradiciones de esta ciudad.

Las más modernas tecnologías han revolucionado el mundo de las artes gráficas. «Pasar de lo manual a lo digital ha sido un cambio radical, grandísimo», comenta Celestino Peón Gómez. Pero esta imprenta ha sabido conservar, al mismo tiempo, aquel ambiente artesanal, el olor a papel y tinta fresca. La magia del viejo local se mantiene casi intacta, con su particular homenaje a Gutenberg y al fundador de la empresa familiar.

Celestino Peón Gómez tiene como un tesoro una máquina impresora de 1863 que comprara su abuelo a un americano en Ponte Caldelas. Y también una Minerva de los años veinte, «que aún seguimos utilizando para trabajos artesanales especiales en pergamino», como los diplomas de los Premios Cidade de Pontevedra que concede el Ayuntamiento.

Con esta máquina se imprimió la famosa revista Sonata Gallega, dirigida por Ramón Peña. En este taller se imprimió también uno de los clásicos de la literatura gallega, la primera edición de Os vellos non deben de namorarse de Castelao, cuyas pruebas corregía el insigne autor. Y otros muchos escritores confiaron en la Imprenta C. Peón para editar sus libros: Celso Emilio Ferreiro, Faustino Rey Romero, Fermín Bouza Brey, Luis Viñas, Álvarez Blázquez o Manuel Cuña Novás.

El gremio de los pintores también ha tenido esta casa como referente a la hora de hacer litografías de sus obras y catálogos de sus exposiciones. Es el caso de Sobrino, Rafael Alonso, Conde Corbal, Barreiro, Rafael Úbeda, Cifuentes, Manolo Ruibal, Pintos... «Y el gran Leopoldo Novoa, recientemente fallecido, nos encargó también su catálogo para la exposición que hizo en Caja Madrid en 1995. Vino él personalmente a la imprenta y me llevó a su casa de Armenteira para ver los cuadros». Celestino Peón, lo recuerda como una «gran experiencia».

Pontevedra ha sido cuna de grandes impresores y en la actualidad esta empresa de artes gráficas es la más antigua de la ciudad. Uno de sus últimos trabajos ha sido la décima edición del Memorial Filgueira para la cátedra que lleva el nombre del ilustre profesor, promovida por el Museo y la Universidad de Vigo.