Alertan de una estafa con el alquiler de apartamentos vacacionales en Oropesa

PONTEVEDRA
La Guardia Civil teme que víctimas pontevedresas aún desconozcan que fueron timadas de cara a la Semana Santa
08 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El arresto de tres marroquíes, dos mujeres y un hombre, ha permitido a la Guardia Civil el esclarecimiento de setenta estafas en todo el territorio nacional en las que las víctimas habían alquilado a través de Internet apartamentos vacacionales inexistentes en Oropesa del Mar. El temor en el seno del instituto armado es que el número de afectados pueda ser una cifra muy superior y, de hecho, apuntaron la posibilidad de que existan víctimas en Pontevedra que aún desconozcan que han sido engañadas.
En este sentido, un portavoz del instituto armado para la provincia de Castellón precisó ayer que, dada la proximidad de la Semana Santa, cabe la posibilidad de que algunos pontevedreses hubiesen contactado en los últimos tiempos con los detenidos para alquilar un apartamento. De este modo, hasta el momento en el que se desplazasen hasta Oropesa e intentasen localizar la vivienda vacacional no se percatarían de que han sido timados.
De hecho, esto es lo que les pasó a los primeros denunciantes, quienes comprobaron que los pagos que habían adelantado se esfumaban al igual que las viviendas donde pensaban pasar unos días de asueto.
Estas mismas fuentes precisaron que los setenta casos de los que se tiene, por el momento, conocimiento están repartidos por toda la geografía nacional, incluyendo previsiblemente Pontevedra. Las dispersión y variedad de las víctimas se explica en el hecho de que los sospechosos, supuestamente, anunciaban unas ofertas muy jugosas en páginas web del sector turístico «muy conocidas y con un amplio rango de usuarios». De este modo, en el momento que una víctima potencial se interesaba por uno de los apartamentos, estos contactaban con ella a través de correo electrónico y les explicaban que debían realizar un ingreso en alguna cuenta bancaria creada, en principio, con esta única meta.
Ocultaban su rastro
A la hora de llevar a cabo todos estos movimientos, los ahora detenidos llevaban a cabo una serie de maniobras con las que trataban de ocultar su rastro y dificultar la labor de los investigadores. A este respecto, la Guardia Civil señaló que «pirateaban las redes wi-fi de los vecinos para poder publicar sus anuncios en las páginas web», al tiempo que abrieron las «cuentas bancarias con documentación falsa».
De este modo, a la imputación de estafa se le sumaron las de falsedad documental, usurpación de estado civil, defraudación en las comunicaciones, revelación de secretos y pertenencia a banda organizada.