El Xurado de Montes rechaza el recurso de Noalla sobre el monte de A Lanzada
PONTEVEDRA
La resolución afirma que la clasificación de 1989 no condiciona el nuevo procedimiento
09 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El Xurado Provincial de Montes rechazó ayer el recurso de alzada planteado por la comunidad de Noalla para reclamar que se revisase la decisión previa de no clasificar estos terrenos a favor de los sanxenxinos y reconocerle la titularidad de los terrenos en disputa a Costas. En sus consideraciones para justificar esta decisión, el Xurado sostiene que «non debe estar condicionado polo xa resolto no ano 1989 sinxelamente porque estamos perante un procedemento de clasificación iniciado ex novo». Por lo tanto, no pueden atenderse solo los antecedentes, sino también as nuevas circunstancias jurídicas.
«A día de hoxe non é posible ignorar as circunstancias xurídicas que afectan á catalogación do monte da Lanzada, a raíz do deslinde aprobado pola orde ministerial de 1993, e a clasificación da zona cuxa clasificación se pretende como espazo natural de especial protección», resalta el Xurado. Este organismo añade que estos aspectos «condicionan, e moito, o uso que na actualidade puidera darse polos veciños de Noalla sobre o terreo».
El Xurado precisa además que el informe del Servizo de Montes es «claro» a la hora de apoyar su decisión y justifica su criterio sobre el uso y disfrute de las parcelas cuestionadas.
Se recuerda también que en la actualidad hay una nueva catalogación jurídica de los terrenos que no existía en 1989 cuando se clasificó el monte a favor de Noalla en una decisión que posteriormente anuló la Justicia por defecto administrativo en la tramitación. «O réxime especialmente tuitivo e protector que na actualidade rexe sobre os terreos da Lanzada resulta incompatible cos usos» que aboga Noalla como agrupación vecinal y «non se pode inferirse un aproveitamento consuetudinario polo grupo veciñal no momento presente».
En las consideraciones sobre esta decisión, se recalca que la interpretación de la Ley exige que esos usos consuetudinarios se puedan seguir aplicando en la actualidad, factor que no se cumplen. También se da total validez al deslinde de 1993 y se recuerda que Noalla no se opuso a su contenido.
Por último, el Xurado destaca que la resolución anulada de 1989 a favor de Noalla «non actúa como un condicionante inamovible para este órgano, pois resulta evidente que de ser así nin tan sequera tería sentido dar audiencia e admitir as alegacións do Grove». Contra esta decisión, solo cabe ahora la vía judicial de lo contencioso administrativo.