El puerto olívico es el primero estatal, el marinense, segundo; y el arousano, quinto
02 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Los tres puertos principales de las Rías Baixas concentran más de la mitad de los algo más de dos millones de metros cúbicos de capacidad de almacenamiento en frío y en instalaciones frigoríficas que hay en las radas de España. Es un liderazgo que los puertos de Vigo, Marín y Vilagarcía no solo han afianzado, sino que se ha incrementado en los últimos años. El buen momento que atraviesa el sector frigorífico en la provincia de Pontevedra es todavía más significativo si se tiene en cuenta que este ámbito de actividad industrial ha crecido en buena parte de las radas estatales españolas. Es decir, aunque la competencia en la Península Ibérica es mayor, la reacción de empresas y autoridades portuarias del sur gallego les ha incluso permitido distanciarse con respecto a otras áreas geográficas.
Hace 16 años, Marín y Vigo suponían el 25 % de la capacidad frigorífica de España. El sector continuó su línea ascendente pero su crecimiento se ralentizó con la crisis económica general. No obstante, los empresarios de las Rías Baixas y sus autoridades portuarias supieron capear el temporal. Hace siete años, las instalaciones de almacenamiento de frío de la provincia copaban ya el 54 % de la capacidad frigorífica de España. Ahora, siguiendo los últimos datos aportados por las 28 autoridades portuarias a Puertos del Estado, esta cifra ha crecido hasta algo más del 56 %.
Vigo es, sin lugar a dudas, el gran gigante frigorífico español. No en vano la ciudad olívica es la sede de Conxemar y su posición privilegiada en el almacenamiento, procesamiento e innovación tecnológica ha permitido que los productos gallegos se hayan lanzado a la conquista de nuevos mercados, tras consolidarse en otros más tradicionales como España, Portugal, Francia e Italia.
Un total de 36 empresas
Según las estadísticas de Puertos, el puerto de Vigo concentra 819.718 metros cúbicos. El siguiente puerto que le sigue es Marín, aunque muy a la zaga, con 255.217 metros cúbicos de capacidad de almacenamiento en frío. En esta lista, el tercero es Las Palmas, pero con algo más de 170.000 metros cúbicos de capacidad de frío, se queda todavía más en la distancia.
El puerto de Vilagarcía, que en dos naves frigoríficas dispone de 97.000 metros cúbicos de instalaciones de este sector, se sitúa por encima de la media estatal, en una quinta posición, por debajo de Valencia. Ferrol carece de esta clase de instalaciones, mientras que en A Coruña solo hay 77.060 metros cúbicos de capacidad de frío. Fuera de Galicia, Motril y Alicante tampoco tienen y en otra autoridades portuarias como Avilés o Baleares es meramente testimonial.
La pujanza del sector de los frigoríficos en los puertos de la provincia tiene también una importante consecuencia a efectos laborales. En el puerto vigués hay hasta 23 empresas con instalaciones de esta clase, mientras que Marín, un puerto de dimensiones pequeñas en el conjunto de la actividad de Puertos del Estado, se contabilizan hasta once firmas con intereses comerciales en el sector frigorífico. En Vilagarcía, hay dos. Sin embargo, cabe recordar que este es un ámbito en el que da trabajo a miles de personas a lo largo del año. Ténganse en cuenta los puestos en alta mar de aquellos que capturan cefalópodos o pescados, la estiba y desestiba, las plantas de procesamiento en tierra -donde el empleo habitual de mujeres contribuye a reducir el paro femenino-, y los transportistas, por citar algunos de los colectivos más directamente implicados.