El cuadro catalán venció 2-0 al Betis diez años después de su primer título en el torneo
16 may 2020 . Actualizado a las 18:36 h.El R.C.D. Espayol sucedió al Villarreal en el palmarés del Torneo Internacional Alevín Arousa Fútbol 7. Lo hizo ganando seis de sus siete partidos en el campeonato. Los cuatro de la fase de liguilla, su semifinal frente al Real Madrid, 1-3, y la gran final con un 2-0 sobre el Real Betis. Solo el Ajax lo privó del sabor del triunfo en el tiempo reglamentario, cayendo el conjunto holandés a penaltis tras su empate a 2 en la primera ronda del k.o., los cuartos de final.
Con ellos arrancó la tercera y última jornada de un campeonato que alcanzó su vigésimo cuarta edición estrenando escenario en los campos municipales de A Senra, Ribadumia, tras la ruptura de relaciones de la organización con el gobierno local de Vilagarcía. Unos cuartos de final de los que el Celta salía airoso con un 1-2 ante el Rayo Vallecano, el Real Madrid se imponía en el gran clásico al Barça con un solitario tanto de Paulo Iago Álvarez en el minuto 18; y el Betis goleaba, 4-1, al Real Valladolid.
Si el Espanyol superaba en las semifinales el escollo del sempiterno candidato merengue a recuperar el cetro del AF7 -no lo ha vuelto a ganar desde el año 2005-; el Betis se plantaba en el partido por el título emulando los números de su adversario catalán. Habiendo ganando sus cuatro partidos de la fase de grupos el viernes y el sábado. Y necesitando del comodín de los lanzamientos de penalti para doblegar a un Celta que un año más se quedó con la miel en los labios después de un insuficiente 1-1 en su semifinal con el cuadro sevillano con el balón en juego.
El partido por el cetro del torneo alevín tuvo en el Espanyol un equipo dominante en la primera mitad. Con una presión sobre la salida del balón que le deparó dos tantos a modo de golpe psicológico. El primero, un lanzamiento lejano de David Escoda que coló por la escuadra izquierda de la meta bética al borde del descanso. Y el segundo, al poco de la reanudación, con el españolista Nahum Bardolet recibiendo al borde del área para disparar acompañando la percusión del cuero en su raudo giro de caderas. Fue poco después de que el andaluz Manuel García estrellase el primero de los dos balones del Betis a la madera en la final. El otro, casi tras el saque de centro, fue un cabezazo de David Cordón que mandó el cuero al travesaño, botando fuera.
A partir de ahí el cuadro sureño se echó adelante, pero el Espanyol tuvo también ocasiones para ampliar un marcador que le permitió levantar de nuevo el trofeo del AF7 diez años después.
Premio compartido al mejor jugador
En la larga lista de premios individuales, destacó la decisión inusual de la organización de conceder el trofeo a mejor jugador del torneo no a uno, sino a dos jugadores: Iván Corralejo, dorsal número 7 del Real Betis, y Pablo Melero, 5 del Real Madrid. Curiosamente, mientras el segundo figura también en el siete ideal, el bético no aparece en una relación compuesta, además de por Melero, por los futbolistas del Celta Ángel Davila (dorsal 9) y Anxo Rodríguez (4), los españolistas Adriano Torres (1), Leo Salazar (8) y Miguel Londoño (12), y el compañero de equipo de Melero Jaime Pascual (dorsal 4 del Real Madrid). Adriano Torres recibió además el premio a mejor portero, y Ángel Davila al de máximo goleador. Al margen de los futbolistas, Yelko Farpón, del Ural, fue reconocido como mejor entrenador y el Makkabi Frankfurt como equipo más deportivo del AF7 2019.