Ence recurre al Supremo y hará una reclamación patrimonial al Estado si pierde

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

Sostiene que «esgotará todas as vías xurídicas» en defensa de la prórroga

29 sep 2021 . Actualizado a las 04:47 h.

Ence publicó sus resultados del segundo trimestre de este año, período en que regresó a beneficios. Sobre su fábrica de Pontevedra explicó, por un lado, que ayer recurrió las sentencias de la Audiencia Nacional que anularon la prórroga de la concesión de Costas en Lourizán. Por el otro, que hará una reclamación patrimonial al Estado sin finalmente se viese obligada a cerrar la fábrica.

Ence señala que, en cumplimiento con la normativa contable, la sociedad registró en sus cuentas el impacto de un eventual cierre de Pontevedra, por importe de 196 millones de euros. Añade: «A normativa contable non permite provisionar os custos do futuro ERE de extinción dos traballadores da planta de Pontevedra e de parte da estrutura corporativa do grupo».

La empresa insistió, tras presentar los recursos ante el Supremo, que «esgotará todas as vías xurídicas en defensa da legalidade da prórroga». En caso de cierre, Ence tendría que hacer frente a un desembolso de 48 millones y el ERE no provisionado. El deterioro de activos vinculados a la fábrica supone un importe neto de 148 millones, que no conllevará una salida de caja. Además, formulará reclamaciones de responsabilidad patrimonial ante el Estado, como indemnización por «todos los perjuicios causados por dicha anulación», según su informe a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

Vista de la zona de contenedores del puerto de Marín
Vista de la zona de contenedores del puerto de Marín

El Concello y el comité de fábrica ven «inviable» adscribir los terrenos al Puerto

 

S.B.

La posibilidad de mantener a Ence en Lourizán adscribiendo los terrenos al Puerto es «unha vía cega que xa foi descartada hai 16 anos», tal y como recordó este martes el concejal de Infraetsructuras, César Mosquera (BNG). El Concello de Pontevedra ve inviable esa alternativa que se puso sobre la mesa el pasado lunes en una reunión entre los trabajadores y la Xunta y que para el PP local es «la única solución viable» para mantener la factoría.

Mosquera recordó que en el año 2005 se barajó esa posibilidad y fue descartada «contundentemente» hasta el punto de que entonces la propia Xunta renunció a seguir adelante. El argumento más claro es que los terrenos de los puertos son espacios de dominio público marítimo-terrestre sometidos al mismo tratamiento que los que actualmente ocupa Ence. Por lo tanto, si la Audiencia Nacional no encontró justificado que la fábrica únicamente pueda operar en su ubicación actual, tampoco se justificaría si los terrenos pasan al Puerto, un recinto, además, en el que solo pueden desarrollarse actividades relacionadas con la actividad portuaria.

Así las cosas, Mosquera considera que «é evidente que esta vía terá menos percorrido do que tivo no ano 2005. As sentenzas non poden ser saltadas facendo fraudes. Volver resucitar unha vía que xa estaba cegada hai dezaseis anos é crear unhas expectativas absurdas, marear a xente, e sen ningún viso de que vaia chegar a nada. Ence non pode estar aí e hai que buscar unha localización alternativa».

En el mismo sentido se manifestó el comité de fábrica de Ence, que lamentó que el escenario planteado por la Xunta «é moi preocupante porque parece que solo queren deixar correr o tempo enredándonos en consultas legais. Todos lembramos o intento nos tempos pretéritos de pasar os terreos ao porto de Marín, fracasando no intento».

El PP exige a Lores que rebaje la tensión y Mosquera recuerda episodios violentos

 

S.B.

El portavoz municipal del PP en Pontevedra, Rafa Domínguez, pidió ayer al alcalde que contribuya a rebajar la tensión existente en torno al conflicto de Ence y a la posibilidad de que 500 familias se vean sin trabajo. «La situación es muy tensa -señaló- por lo que pido que las manifestaciones se hagan conforme a la ley. Pero también exijo que el alcalde respete a las 500 familias que se pueden ir al paro, ya que sus declaraciones son muchas veces despectivas hacia los trabajadores, llenas de rencor y casi siempre hechas desde la prepotencia y el desprecio». Domínguez se refirió en concreto a que desde el Concello se refieran a los trabajadores como «Ence-borroka». «Eso no ayuda a rebajar la tensión y le recuerdo que sigue siendo el alcalde de todos», aseguró.

César Mosquera, por su parte, cargó contra el portavoz del PP por estas declaraciones. «Hai que ter a cara dura, dura, dura. O PP animou aos que tomaron o Concello, aos que rebentaron o pregón. Unha das accións habituais da kaleborroka era esa, rebentar pregóns, o chupinazo e cousas así. Exactamente o mesmo que fixeron aquí os traballadores de Ence».

Además, el concejal del BNG recordó episodios violentos como el zarandeo del coche del alcalde. «Confundimos as vítimas cos violentos», afirmó, al tiempo que invitó a los trabajadores a que reclamen «o que queiran, que colguen pancartas. Pero a violencia directa e persoal está fóra de lugar».