Expertos en patrimonio cultural se citan en Pontevedra: «Estamos a expensas de que nos movilicen en La Palma»
PONTEVEDRA
Ángel Luis de Sousa Seibane y Pilar Montero Vilar, intervinieron en el Encontro de Conservación e Restauración. Xestión de riscos e emerxencias no Patrimonio Cultural
27 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Ángel Luis de Sousa Seibane, integrante de la Dirección General de Bellas Artes del Ministerio de Cultura y coordinador del Plan Nacional de Emergencias y Gestión de Riesgos en Patrimonio, y Pilar Montero Vilar, de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid, son dos los expertos que intervinieron estos días en el Edificio Castelao en el Encontro de Conservación e Restauración. Xestión de riscos e emerxencias no Patrimonio Cultural.
—¿En qué radica la importancia de un encuentro como este?
—[Pilar Montero] Desde mi punto de vista, en la concienciación de toda la comunidad. Es importantísimo que se conozca y que la gente se integre y se interese por estos temas que nos van a afectar sí o sí.
—[Ángel Luis] Efectivamente, la gestión de riesgos y emergencias en patrimonio cultural es algo que es fundamental difundir para que se quede grabado en la conciencia colectiva porque estamos viendo, con los efectos del cambio climático, como nos estamos quedando sin el legado cultural.
—¿A qué achacan este poco conocimiento de esta situación?
—[PM] Es un tema bastante complejo. La cultura, muchas veces, no se considera todo lo prioritario, no se considera una de las estructuras básicas y, en ese sentido, somos un poquito mezquinos. Lo prioritario son las personas, pero es que la cultura son las personas. La clave está en la disociación entre la cultura y la vida. Y la cultura es vida y cuando entendamos esto, la cultura pasará a un lugar prioritario.
—En todo caso, desde el Ministerio se tiene un protocolo de actuación ante emergencias.
—[AL] El ministerio y el resto de administraciones públicas de este país nos hemos ido dotando de instrumentos y estrategias desde Lorca hasta aquí. Una de las fundamentales es el Plan Nacional de Emergencias y Gestión de Riesgos en Patrimonio y una de sus líneas de trabajo es una herramienta fundamental, de tal modo que en el corto o medio plazo va a ser de obligado cumplimiento, que son los Planes de Salvaguarda de Bienes Culturales.
—¿Hasta que punto fueron los terremotos de Lorca una llamada de atención?
—[AL] Hasta todos los puntos. Fue un antes y un después, generó el debate, ya que hasta ese momento los sectores implicados en las emergencias ignoraban por completo la obligación constitucional de proteger el patrimonio. Ahí se generó el debate de ampliar el concepto de emergencias que antes solo cubría a las personas.
—[PM] Totalmente de acuerdo. Fue un antes y un después. Ha puesto la emergencia en patrimonio cultural en el centro de las políticas públicas. Lo fundamental es que ese desarrollo se implemente en todos los niveles, a todas las administraciones y que llegue a todas las partes de España, porque es uno de los países más ricos en patrimonio cultural.
—Precisamente, estamos viviendo una emergencia, como es la de La Palma. ¿Imagino que una de las preocupaciones es su patrimonio?
—[AL] Nosotros tenemos un protocolo en el ministerio. En cuanto se produjo la erupción, la Dirección General de Bellas Artes se puso en contacto inmediato con la directora general de patrimonio canario para ofrecer las capacidades del Plan Nacional y desplegarlo allí. Quizás no era el momento porque se estaba atendiendo todavía a la población, pero sí hay un plan para hacer un despliegue de las unidades de emergencia del Plan Nacional sobre el terreno. En concreto, en un museo arqueológico y etnológico que hay en la zona de influencia del volcán. Posiblemente, haya que estudiar las estrategias de protección e, incluso, evacuación. Estamos a expensas de que nos movilicen.
—El futuro, ¿cómo se presenta en este ámbito?
—[PM] Lleno de incertidumbre. Hay que incorporar la incertidumbre a la gestión. Ese es el reto. Sabemos que las emergencias van a ocurrir y tenemos que utilizar todo el conocimiento y desarrollos tecnológicos para gestionar esa incertidumbre.