La contundencia y el empoderamiento femenino marcan el arranque del SonRías Baixas de Bueu

Alfredo López Penide
L. Penide BUEU / LA VOZ

PONTEVEDRA

María Aragón

Sofia Gabanna se despidió del público envuelta en una estreleira y Rels B ofreció todo un espectáculo en una noche en la que JazzWoman dejó patente el porqué es uno de los referentes de rap valenciano

05 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace más de un cuarto de siglo que un anuncio de Pirelli popularizó el eslogan de que «la potencia sin control no sirve de nada». Ayer en la primera noche del SonRías Baixas de Bueu quedó de manifiesto todo lo contrario, que la potencia contenida y dosificada en su justa medida es todo un espectáculo.

No cabe duda de que el público quería fiesta y sobre el escenario había quien quería dársela. La diecinueve edición del SonRías Baixas arrancó este jueves con una enérgica, poderosa, empoderada -y seguramente estos adjetivos se quedan cortos- JazzWoman desde el escenario Xacobeo 21-22. Ofreció un concierto que comenzó con una sesión de la banda y en la que la rapera valenciana interpretó, entre otros temas, Cançons d'ofrenda, Suavemente o Pa' la discoteca, canción que dedicó con epítetos lo suficientemente contundentes a los sinvergüenzas que se dedican a pinchar a mujeres.

María Aragón

Tras JazzWoman, y ya en el escenario Turismo Rías BaixasMaurino animó al público con su tema Somos más en una actuación en la que tampoco faltaron canciones como Estrés, Fiesta o Las revueltas. Por este mismo escenario pasarían posteriormente Cool Nenas con una propuesta de esas que buscan romper caderas y quemar las pistas de baile pinchando reconocidos temas de las últimas décadas acompañados por hipnóticas coreografías.

En el otro, la atención la despertaron Sofia Gabanna, que en su primera actuación en el SonRías Baixas descargó toda su artillería pesada con Cuéntame, Marciana, Marvin o Asesina, con la que se despidió envuelta en una estreleira de un público que tenía metido en el bolsillo. Por cierto, no tuvo empacho en parar su concierto para cantarle el Cumpleaños feliz a una asistente.

ROCIO CIBES

El público recibió por todo lo alto a Rels B, una de las citas más esperadas del festival y que no defraudó con un espectáculo con un potente juego de luces, efectos de artificio y con muchos aficionados de ambos sexos coreando todos y cada uno de sus temas. Desde Yo tengo un ángel o Me gustas natural hasta La última canción, que como indica el título fue la elegida para cerrar su presencia en Bueu.

La primera de las tres noches del SonRías Baixas concluyó con el directo del dúo electropop Delaporte, que tenía previsto interpretar algunos de los temas más conocidos de su repertorio. Desde Cariñito o Droga dura hasta El volcán o Bang bang, sin olvidar el remix que hizo de Toro, de El Columpio Asesino.