José Manuel Suárez, presidente de los comuneros de Saiar: «Dábanse todas as condicións para que ardera desa maneira»
PONTEVEDRA
El incendio del Xiabre calcinó 450 hectáreas y los vecinos confían en que la investigación del fuego dé esta vez resultados gracias a las cámaras de vigilancia
09 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El incendio forestal que se originó el pasado jueves, 4 de agosto, a las 19.25 horas en una zona del monte Xiabre de la parroquia de Saiar, en Caldas de Reis, todavía no se da oficialmente por extinguido. El fuego, que calcinó una superficie de 450 hectáreas y obligó a movilizar numerosos medios terrestres y aéreos —entre ellos, 55 brigadas, 44 motobombas, 7 aviones y 11 helicópteros—, sí está controlado. El presidente de los comuneros de Saiar, José Manuel Suárez, valoraba ayer el impacto de las llamas. «En Saiar son unhas 320 hectáreas, pero falta a zona de Godos e de Vilagarcía», dice. El último gran incendio en el Xiabre fue el del 2017. Aunque el del jueves lo supera en hectáreas quemadas, para los comuneros aquel fue todavía más devastador porque arrasó plantaciones que tenían 25 años de antigüedad. «Para nós a nivel de comunidade de montes foi peor o do 2017, neste o 70 % era de particulares. Agora ardéronnos plantacións recentes, entre un e sete anos, que é madeira para triturar», explica José Manuel Suárez. Entre lo que redujo a cenizas el fuego está la plantación que hicieron voluntarios en el marco del festival PortAmérica, en enero del 2020. «Aquelo ardeu todo, é na zona do Picoto, a ambos lados dos cortalumes. Eran frondosas».
Al igual que decían el viernes vecinos del lugar de Porteliña, cuyas casas estuvieron cerca del fuego pero no se llegaron a desalojar, nadie duda de la intencionalidad de este incendio forestal. El presidente de los comuneros de Saiar también es de esa opinión y se muestra rotundo: «Foi intencionado, sen lugar a dúbidas. O monte non prende só. Dábanse todas as condicións para que ardera desa maneira». La investigación del fuego está en marcha, pero en Saiar tienen experiencia en saber que casi nunca se atrapa al autor o autores de los fuegos. «Non sei nada da investigación. Por alí non escoitei que se vira a algún descoñecido. Esperamos que esta vez sexa distinto», recalca. Los comuneros aluden a que la Xunta instaló en una caseta del Xiabre unas cámaras de vigilancia que tienen un gran alcance. «Non sei se teñen indicios de algo ou non, pero salvo que fora andando, esas cámaras deberían dicir algo. Non sei se temos ou non axente forestal aquí. Desde que marchou Ana ninguén falou comigo e xa van uns cantos meses», se quejó José Manuel Suárez.