Los trabajos de sellado de filtraciones y refuerzo del muro demostraron su eficacia
24 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La provincia de Pontevedra sigue en prealerta por escasez de agua por sequía prolongada en un verano de escasas precipitaciones y muchísimo calor. Mientras el marinense Lameira se ha transformado en un pequeño regato y el pontevedrés Gafos no llega ni a recubrir la base de los muros junto a su desembocadura, en Castiñeiras se exhibe una imagen totalmente distinta. Y es que el lago, que todos los veranos, independientemente de que lloviese o no, se quedaba a dos velas, este 2022 luce azul y con apenas retroceso del nivel del agua.
De esta forma, esta temporada estival de sequía se ha convertido en la prueba del algodón de una obra que se realizó hace varios años, por parte del Concello de Marín, y que implicó vaciarlo del todo. En aquella ocasión, se desarrollaron trabajos en el muro de contención del lago, cerrando fisuras y grietas, reparando la tubería que da salida al agua hacia el Lameira y rehabilitando el sistema de compuertas. Además, se aprovechó para retirar las especies invasoras de fauna y flora que había en este lago, que se repobló con truchas cuando se volvió a llenar.