Luli Pampín, cantante: «Detrás de cada canción de Halloween me gusta dejar un mensaje o enseñanza»

PONTEVEDRA

CEDIDA

Los temas de esta cantante forman parte de la banda sonora de muchos niños pontevedreses durante estas fechas

30 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Si el sábado se habló de lecturas para Samaín, hoy toca la banda sonora. Y la culpable de que muchos padres y madres tengan más interiorizadas canciones como Chumbala cachumbala, Camino en Halloween o Tumbas por aquí, tumbas por allá que las de The Beatles, Bruce Springsteen, Rosalía, Bizarrap o Quevedo es Lucía Pérez Gerardi, más conocida como Luli Pampín.

—En el caso de que nos lea un extraterrestre y no haya oído hablar de usted, ¿quién es Luli Pampín?

—Es una muñeca de una cajita musical, un juguete que soñaba con ser realidad y que, gracias a su mejor amiga, que es la radio mágica, y a la imaginación de los pequeños, lo consigue. De ahí se convierte en la superheroína que conocen hoy en día.

—¿Es consciente de que muchos progenitores se saben mejor sus temas que los de las grandes estrellas del rock?

—Sí, además son canciones que se quedan en el cerebro. Estás cocinando, estás conduciendo y vas cantando «a mi burro, a mi burro...». Son inevitables en el cerebro.

—Una de las cualidades de su discografía, a mi juicio, es que compagina temas tradicionales o de todo la vida que hace suyos con composiciones propias.

—Claro. Las canciones tradicionales forman parte de nuestra vida, de la vida de nuestros padres, de la de nuestros abuelos y es algo que tenemos desde pequeños. Está lindo que a un papá o a una mamá le venga ese recuerdo de cuando cantaba de chiquito, igual que me lo traen a mí. Y, de igual modo, que si los niños no la conocían, pues que la conozcan. Luego me gusta meter contenido nuevo en las canciones de mi autoría, cosas que me encanta inculcar, aprender... a veces de forma implícita y otras, explícita. Decir esto es para aprender los colores o vamos a aprender a lavarnos las manos y en otras, como sé que les gusta mucho Halloween, por ejemplo, utilizar los monstruos para aprender los colores, los días de la semana o con esta canción a no tener miedo. Hay que meter un poquito de todo.

—Alude a Halloween, que lo tenemos a la vuelta de la esquina, y es algo que forma parte intrínseca de su biografía musical.

—Sí, la verdad. Me parece una época muy divertida y sé que a los niños les encanta porque les llama la atención el susto que se les puede dar con los personajes, pero siempre afrontándolo para no tenerle miedo, de pasárnoslo bien, ya sea una canción de un monstruo que fue una pesadilla, pues nos vamos a reír de esa pesadilla, o con El baile de los esqueletos vamos a aprender los estilos musicales. Detrás de cada canción de Halloween que he compuesto me gusta dejar un mensaje o enseñanza. De paso que nos divertimos con los monstruos, aprendemos.

—¿En qué proyecto se encuentra Luli Pampín?

—Estamos preparando el show de Navidad en Madrid y este fin de semana tengo un show en Valencia, pero estamos trabajando para ir a un montón de provincias más.

—¿Y canciones nuevas?

—Acaba de salir mi nuevo disco, La ronda de Lulita, que tiene un montón de canciones para aprender. La canción que le da nombre es un tema para divertirse haciendo la ronda, como cuando los niños juegan y se agarran de la mano y empiezan a girar. Luego tenemos para aprender los colores, las vocales... hice la de El bombero y la bombera porque me gustaba mucho introducir el tema de las mujeres en las profesiones. En todos las canciones que compongo últimamente, aparte de divertidas, dejan un mensajito en el corazón para siempre.

—Para rematar, ¿qué es la mayor alegría que se puede llevar?

—La alegría con Luli Pampín me la lleve cuando tuve mi primer fan, que fue mi hijo, y, de ahí en adelante, cada niño que me ha seguido o cada familia que me ha abierto sus puertas. Saber que la primera palabra de un bebé es el beso de Luli Pampín o las familias que me escriben que tienen niños con síndrome de Asperger o de autismo y que me dicen que las primeras reacciones que tienen o que hablan son con mis canciones es algo impresionante. Es algo que, a día de hoy, me sigue alucinando y que me sigue dando fuerzas para seguir haciendo mi trabajo con todo la devoción y todo el amor como lo llevo haciendo hasta ahora.