Una espectacular bajamar descubre la ensenada arousana de O Bao y amplía la anchura de A Lanzada

Marcos Gago Otero
Marcos Gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

M.G.

El retroceso temporal del mar deja por unas horas a la vista amplias extensiones de terreno habitualmente sumergidas

22 feb 2023 . Actualizado a las 16:10 h.

Una espectacular bajamar sorprendía este miércoles por la mañana a los vecinos y visitantes del entorno del istmo de A Lanzada, dejando al descubierto una gran extensión de la ensenada de O Bao, entre los municipios de Sanxenxo y O Grove. El efecto visual era como si el mar se hubiese retirado kilómetros hacia el interior de la ría, mientras quedaban a la vista amplias extensiones arenosas y de vegetación marina habitualmente bajo las aguas.

Es un escenario que se está repitiendo esta semana con la reproducción de algunas de las bajamares más grandes del año. El impacto visual es, en este sentido, especialmente llamativo entre el istmo de A Lanzada y la costa de A Revolta, que quedaron durante varias horas unidos por la superficie arenosa de la playa sin agua. Sin embargo, no fue el único lugar en el litoral de la comarca que llamó la atención por una bajamar especialmente importante y que permitió, en el caso de A Illa, que las mariscadoras pudiesen trabajar debajo del puente que une este municipio con Vilanova.

Ensenada de O Bao, ría de Arousa
Ensenada de O Bao, ría de Arousa M.G.

Al otro lado del istmo de A Lanzada, el que mira a mar abierto, la playa de A Lanzada parecía que había multiplicado su anchura por dos este miércoles por la mañana. Rocas que habitualmente están rodeadas o totalmente cubiertas por el mar, fueron de relativo fácil acceso al quedar a la vista con solo arena en su entorno, mientras que los islotes que salpican esta costa acrecentaron durante unas horas sus superficies ante los visitantes que se acercaron a hacer fotos a este litoral único en Galicia.

Entorno de la ermita de A Lanzada
Entorno de la ermita de A Lanzada M.G.

En el entorno de la ermita de A Lanzada, se repetía la escena, multiplicándose la anchura de las playas de Foxos, Nosa Señora y Areas Gordas. En la parte más expuesta del entorno de la ermita, justo bajando las escaleras que llevan a las rocas, este miércoles hubiese sido posible, con el calzado adecuado, cruzar a pie hasta el islote que se alza por el lado del mar, ya que el retroceso del Atlántico dejó expedito un camino de arena que se podía transitar con el agua a escasa más altura que los pies.

Playa de A Lanzada
Playa de A Lanzada M.G.

En la ría de Pontevedra, el muelle de As Corbaceiras, en la entrada de la ciudad, se convirtió en una playa con las barcas en seco, mientras que todo el banco marisquero de Os Praceres, así como la costa de Lourido aumentó durante varias horas su superficie expuesta al sol.