La portavoz de los propietarios de viviendas de uso turístico gallegas: «Quienes quieren prohibir el alquiler vacacional es por envidia y chismorreo»

Dulcinea Aguín es la presidenta de Aviturga, la asociación que representa a los propietarios de viviendas de uso turístico de Galicia (VUT). Aguín tiene muy claras las cosas. Siente que defiende a un sector «al que se está demonizando» y niega la mayor: «Nosotros no tenemos la culpa del problema gravísimo que hay con la vivienda en este país. No la tenemos, eso es una cortina de humo», dice con una potencia de voz importante. Tampoco entiende, ni de lejos, el furor que existe en zonas como las Rías Baixas entre las comunidades de vecinos para prohibir en sus edificios las viviendas de uso turístico: «Es surrealista, están devaluando su propiedad», indica.

—Hay un problemón para encontrar casas para vivir en los centros de la ciudades, incluso en los municipios pequeños. ¿No tiene nada que ver en eso con el bum de las viviendas turísticas?

—No, no y no. ¿Qué datos quieres que dé? En Pontevedra hay cuatro mil viviendas vacías y en Santiago nueve mil. En España son 4,2 millones de casas vacías... ¿Por qué no se le mete mano a eso, por qué toman medidas para que eso no suceda? Lo que pasa es que hay unos problemones tremendos con el alquiler a largo plazo y la gente no quiere poner sus viviendas en el mercado. Y muchos se refugian en el alquiler vacacional porque tienen pánico a impagos o a que les dejen los pisos destrozados y eso con el alquiler vacacional no suele pasar. Así que claro que hay problema con la vivienda, pero no es nuestra culpa. Y pese a ello nos están demonizando, friendo a impuestos, y a intentar cobrarnos cosas totalmente injustificadas.

—¿Por qué esa demonización que denuncia usted hacia las VUT?

—¿Por qué? Porque en este país hay muchísima envidia, así lo digo. Quienes quieren prohibir los pisos turísticos es por envidia y chismorreo. La gente ve el precio al que tienes la vivienda en una plataforma y empieza a echar cuentas... y como tampoco sabe lo que pagas de impuestos y demás... la envidia aparece rápido.

—Sin embargo, los administradores de fincas dicen que en ocho de cada diez reuniones vecinales se debate sobre prohibir las viviendas turísticas en los edificios y que los argumentos son, principalmente, la falta de seguridad y las molestias que generan los huéspedes...

—Ambas cosas son mentira. En cuanto a los huéspedes, la experiencia nos dice que no generan molestias. Y no hablo por hablar. Los dueños de viviendas turísticas estamos continuamente en contacto con las fuerzas del orden. Si nuestros inquilinos generasen molestias estaríamos enterados y no hay constancia de ello. En cuanto a la seguridad... nosotros tenemos obligación de registrar a todas las personas que se hospedan y pasar sus datos a la Guardia Civil o a la policía, a quien corresponda. ¿Dónde está ahí la falta de seguridad?

—Se refieren a que hay viviendas de uso turístico que pueden no estar dadas de alta y entonces no hay control de los huéspedes...

—Si creen que una vivienda turística no está en una situación regular y legal lo que tienen que hacer es poner una denuncia. Somos los primeros interesados en que lo hagan, se lo pedimos.

—Las comunidades de vecinos que optan por prohibir los pisos turísticos también hablan, por ejemplo, de que no quieren que los huéspedes usen zonas comunes como las piscinas...

—Cada argumento es peor. ¿En cuántos edificios son los propietarios los que llevan a primos, sobrinos, hermanos y demás familia y amigos a bañarse a la piscina? Los huéspedes están ellos y punto, por algo son turistas. No tienen aquí al primo de turno. Me parece que todo tiene más que ver con la envidia y el chismorreo que con otra cosa.

—¿Chismorreo?

—A alguna gente le encanta meterse en la vida de los demás, y con esto de los alquileres pasa bastante. Y hay quien no tiene grandes ocupaciones y está todo el día pendiente de lo que hacen los turistas, cuando nosotros somos los primeros que controlamos nuestra propiedad por la cuenta que nos tiene. Sinceramente, que una comunidad de vecinos prohíba el alquiler vacacional me parece surrealista. Están devaluando su propiedad. Cuando tú vas a comprar un piso y ves que hay un uso que no puedes darle... pues ese inmueble es menos atractivo. A todos ellos les diría que no tomen semejante decisión, que la vida da muchas vueltas y ahora mismo pueden no necesitar tener una vivienda turística pero quizás algún día sus hijos sí... y las cláusulas quedan ahí.

—¿Abogaría por un camino intermedio, por establecer por ejemplo unas normas de convivencia en las comunidades más allá de las que ya pueda haber?

—Pues sí, por ejemplo. Establecer unas normas siempre es positivo, preocuparse por ello es bueno. Lo que no tiene ni pies ni cabeza es devaluar tu vivienda prohibiendo un posible uso. ¿Qué es eso?

«Si en tu edificio prohíben el alquiler turístico, recurre al juzgado. Sin duda» 

Dulcinea Aguín no tiene demasiado claro qué va a pasar con esos acuerdos que están tomando comunidades de vecinos de prohibir los pisos turísticos en sus edificios. Cree, en todo caso, que quienes sean propietarios en esa tesitura y no estén de acuerdo con esa decisión deben tomar medidas legales: «Si en tu edificio prohíben el alquiler turístico, recurre al juzgado. Sin duda, porque te están devaluando la propiedad. Y además hay sentencias muy distintas al respecto, con lo cual es muy posible que te acaben dando la razón». Habla también sobre que tener una vivienda turística no es fácil, porque implica numerosas obligaciones e indica: «Es un alquiler que da trabajo, que implica estar siempre al pie del cañón y por supuesto al día en todas las obligaciones. Pero también tiene la parte positiva de que, por ejemplo, el propietario dispone de su vivienda cuando la necesita o quiere disfrutarla, algo que no sucede con un alquiler a largo plazo».

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