Tercer día del rey emérito sin salir de la casa de Pedro Campos en Sanxenxo

SANXENXO

El Bribón amarrado al puerto deportivo de Sanxenxo este jueves
El Bribón amarrado al puerto deportivo de Sanxenxo este jueves Ramón Leiro

Estaba previsto que Juan Carlos I acudiese a entrenar, pero se canceló la salida en el último momento

23 nov 2023 . Actualizado a las 18:27 h.

Tercer día del rey emérito en Sanxenxo y todavía no se le ha visto. Desde que llegó a las Rías Baixas el pasado lunes a última hora de la tarde procedente de Vitoria todavía no ha salido de la casa de Pedro Campos, su amigo y anfitrión en las Rías Baixas. Era seguro que el martes lo dedicaría a descansar, pero se contaba con que ayer miércoles y sobre todo, este jueves, se subiese a bordo del Bribón, el barco con el que competirá el fin de semana en la última regata de la Liga Española de la clase 6 metros. Sin embargo, ayer no bajó hasta el Náutico de Sanxenxo y tampoco lo hizo hoy. La embarcación estaba preparada para que Juan Carlos I acudiese a navegar alrededor de las doce de la mañana, pero por sorpresa se anuló la salida en el último momento. La realidad es que no había viento para poder entrenar, pero fuentes próximas al monarca reconocen que se prolongaron las gestiones que tuvo que hacer durante la mañana. 

Si en los dos primeros días compartió la comida con su hermana, la infanta Margarita, con su marido, Carlos Zurita, y la hija de ambos, María Zurita, con su hijo, Carlitos, este jueves no hubo visita. Tan solo uno de los miembros del Club Náutico entró pasada la una de la tarde y salió poco después. La casa de Pedro Campos en Nanín se ha convertido en un búnker donde el rey emérito se siente cómodo.

Es la primera vez en las seis visitas que lleva a las Rías Baixas desde que se mudó a Abu Dabi que el monarca tiene una agenda privada tan hermética. Lo habitual en sus otros desplazamientos es que salga a navegar al día siguiente de haber llegado. La vela es una de sus pasiones y el principal motivo por el que Juan Carlos I visita Sanxenxo con tanta frecuencia. En estas dos últimas estancias estuvo acompañado de su familia. De hecho, la infanta Margarita salió ayer a navegar a bordo de la embarcación Cristina. Lo hizo junto a Carlos Zurita, María Zurita y el sobrino nieto del rey emérito, Carlitos. Apenas estuvo una hora por la ría antes de desembarcar y trasladarse a la residencia de Pedro Campos para comer en familia. Está previsto que la familia deje el hotel Carlos I de Silgar y regresé este viernes a Madrid y no se descarta que pueda venir la infanta Elena. 

Hoy se esperaba que se repitiese la misma imagen, pero no pudo ser. Juan Carlos I no salió de la casa de su anfitrión para sorpresa de todos los medios de comunicación que lo esperaban a las puertas de la casa de Campos y en el pantalán del club Náutico, donde su tripulación y la embarcación estaban preparadas para salir a navegar a la ría de Pontevedra. La regata Desafía Barceló, en la que competirá el rey emérito a bordo del Bribón, arrancará el sábado a la una de la tarde. Salvo cambios de última hora, el monarca acudirá a la cita y asistirá esa noche a una cena privada en el Náutico de Sanxenxo. Los únicos reyes que salieron ayer en Sanxenxo fueron los Reyes Magos. Tres mujeres disfrazadas de sus majestades pararon frente a la entrada de la casa de Pedro Campos para intentar ver al emérito.