El lanzamiento del Galaxy Fold fue aplazado tras detectarse problemas en algunas unidades. La compañía coreana ha extendido la capa protectora que se desprendía y reforzado la bisagra
25 jul 2019 . Actualizado a las 19:14 h.El primer móvil con pantalla plegable de Samsung saldrá a la venta finalmente en septiembre, después de los problemas que obligaron a aplazar su lanzamiento, previsto inicialmente para el 26 de abril. Algunas unidades de prueba distribuidas entre periodistas y beta testers presentaban deficiencias, como el desprendimiento de la película protectora del panel táctil y la entrada de cuerpos extraños por las rendijas de la bisagra. La compañía coreana supo reaccionar a tiempo (a diferencia de lo ocurrido dos años antes con el Galaxy Note 7, que llegó al mercado antes de que se solucionaran sus problemas con la batería) y ahora considera que ya está listo para ofrecerlo al público.
«En Samsung siempre hemos tenido como objetivo impulsar la siguiente generación de innovación móvil: nuevos productos y tecnologías que estimulan la industria y acercan a los usuarios lo que actualmente está fuera de su alcance», explican en un comunicado, y reconocen que han hecho modificaciones en el Galaxy Fold «para asegurar que los consumidores tienen la mejor experiencia posible».
La compañía ha analizado y evaluado por completo el diseño del producto, haciendo las mejoras necesarias y realizando rigurosas pruebas que validen los cambios propuestos. Estas mejoras incluyen la capa protectora de la pantalla Infinity Flex Display, que se ha extendido más allá del bisel, haciendo evidente que es una parte integral de la estructura de la pantalla y que no se debe retirar.
También se han realizado refuerzos adicionales para una mejor protección del dispositivo ante partículas externas, manteniendo intacta su experiencia flexible: la parte superior e inferior de la bisagra han sido reforzadas con nuevas tapas de protección; se han incorporado capas metálicas adicionales bajo la pantalla, para asegurar la protección de la misma; y el espacio entre la bisagra y el cuerpo de Galaxy Fold ha sido reducido.
Durante este tiempo, Samsung también ha aprovechado para mejorar la experiencia de usuario, incluyendo la optimización de un mayor número de aplicaciones y servicios. «La compañía está realizando las últimas pruebas para que GalaxyFold esté disponible a partir de septiembre en algunos mercados», explica el primer fabricante de smartphones del mundo.
El Galaxy Fold tiene una pantalla frontal de 4,3 pulgadas, pero cuando se abre como si fuera un libro despliega un panel de 7,3 pulgadas, unas dimensiones que superan a cualquier phablet (híbrido de móvil y tablet) existente. Es posible hacer multitarea con tres aplicaciones abiertas a la vez, y ampliar una u otra simplemente deslizando un dedo. También permite una nueva forma de interactuar con los juegos o herramientas como Google Maps.
El terminal tiene una batería de 4.380 mAh y en principio iba a e estar disponible en seis colores, por un precio de 1.980 dólares (1.778 euros). Según Samsung, este dispositivo «reinventa el smartphone, cambiando la forma en la que interactuamos, nos comunicamos y vivimos hoy en día (...). Las personas podrán acceder a lo esencial en su pantalla mientras sostienen Galaxy Fold cómodamente en una mano y abrirlo para usar varias aplicaciones a la vez. Es posible consultar gráficos mientras se realiza una videollamada y buscar información, todo al mismo tiempo».
El móvil con pantalla flexible se convirtió este año en una obsesión de los principales fabricantes por ser los primeros en ofrecer esta innovación dentro del segmento premium. Pero tanto Samsung como Huawei, su inmediato competidor, encallaron con este dispositivo. En el caso de la firma china, el veto impuesto por Estados Unidos ha retrasado el lanzamiento de un teléfono que en principio iba a estar disponible en verano. Según las últimas informaciones, el Mate X estaría ya únicamente pendiente de obtener la certificación 5G.