Cada contribuyente de la provincia de A Coruña paga por este tributo unos 400 euros
16 ene 2023 . Actualizado a las 23:14 h.Los ayuntamientos cuentan con diversas vías de recepción de fondos para sufragar sus gastos. La recaudación a través de impuestos es una de las principales, especialmente en el caso del gravamen sobre bienes inmuebles. En el caso de los concellos de la provincia de A Coruña, algo más de 400 millones de euros entraron en las arcas municipales a través de impuestos directos e indirectos. Entre estos últimos, algo menos de 30 millones en total, la mayoría procedieron del tributo sobre construcciones, instalaciones y obras, que aportó unos 21 millones. Entre los impuestos directos, el principal es el de bienes inmuebles (IBI). Insuflan siete de cada diez euros procedentes de la recaudación a través de tributos a la tesorería de los concellos: 269 millones de euros, lo que equivale a algo más de 400 euros por vecino.
Dentro del IBI hay tres tipos diferentes según la clasificación del sujeto imponible. Los de naturaleza rústica abarcan instalaciones ganaderas, agrícolas, forestales o piscícolas, y aportan 10,7 millones de euros. Les siguen las de características especiales, con 20,3 millones, que gravan autopistas como la AP-9 o la AG-55, inmuebles destinados a la producción de energía eléctrica, gas o refinerías, embalses, aeropuertos y puertos comerciales. El grueso de esta recaudación procede de los impuestos a bienes de naturaleza urbana, con 238,6 millones. Solo en la ciudad de A Coruña, los impuestos directos suponen unos ingresos superiores a los 100 millones.
Otras fuentes de financiación importantes para los ayuntamientos de la provincia son el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica, con 54,2 millones; el impuesto sobre actividades económicas —que grava a sociedades, autónomos y entidades sin personalidad jurídica—, con 35; y el tributo sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, también conocido como el de plusvalías, con 21 millones.
210 millones en tasas
Los concellos también encuentran una importante vía para financiarse en el cobro de tasas a los ciudadanos. En total, los contribuyentes de la provincia de A Coruña pagan 210,6 millones de euros por ellas. Destacan las cobradas por la prestación de servicios públicos básicos, como el tratamiento de residuos, el mantenimiento de los bomberos o los transportes especiales, con 95 millones. Por la utilización privativa o el aprovechamiento especial del dominio público local —tendidos, tuberías y galerías para las conducciones de suministros o arquetas—, se ingresan 35,1 millones; mientras que por la realización de actividades de competencia local son 12,4 millones.
Las transferencias corrientes suponen, sin embargo, el principal pilar en la financiación de las entidades locales, con 460 millones —los ingresos totales superan los 1.600—. El Estado envía 249 millones a los concellos coruñeses, frente a los 128 de la Xunta.
La actividad empresarial de Cerceda, As Pontes y As Somozas dispara los ingresos
La recaudación a través de impuestos directos por vecino varía enormemente según el ayuntamiento. Los gravámenes sobre bienes inmuebles y actividades económicas permiten contar a los concellos con un gran peso de la actividad empresarial, industrial y energética de ingresos muy altos. El mayor exponente de ello es el concello de As Pontes de García Rodríguez, donde sus tres parques industriales y la central térmica permiten contar con una recaudación de 961,7 euros por vecino solo por la vía de impuestos directos. Situación parecida, aunque sin el enorme potencial energético de As Pontes, en As Somozas (678 euros), Cerceda (587), Mugardos (578,9) y Arteixo (568,1). El primero cuenta además con el mayor gasto por habitante, 3.206 euros.
A continuación aparecen ya las ciudades Santiago de Compostela, con 533,7 euros, y A Coruña, con 456 euros. Algo más abajo en el listado figura Ferrol, con 350 euros. Los vecinos de ayuntamientos de gran peso poblacional, como Narón, Oleiros y Carballo, pagan por esta vía 346, 331 y 282 euros, respectivamente. A la cola están municipios con mayor suelo rústico, dependencia del sector primario y contribuyentes en edad pensionista. Dodro es el último en recaudación por habitante, con apenas 156 euros por vecino en impuestos directos. Le siguen A Baña (166), Oza-Cesuras (180), Lousame (182), Cerdido (188), Irixoa (194), Tordoia (195) y Mesía (196).