Ghaleb Jaber Martínez, director de la Semana de Cine Euroárabe Amal: «La visión del conflicto en Palestina es intencionalmente manipulada»
SANTIAGO
Afirma que el festival trae a Santiago cine de «altísima calidad» y diversidad temática
23 oct 2023 . Actualizado a las 05:00 h.«Nadie está a salvo. Todos estamos en peligro con independencia del lugar en el que hayamos nacido. Nos enfrentamos a peligros como el cambio climático, los extremismos, la manipulación o el capitalismo salvaje. Tarde o temprano todos seremos víctimas». Este es parte de un texto que firma en el programa Ghaleb Jaber Martínez (Santiago, 1981), director de la Semana de Cine Euroárabe Amal, que arranca esta noche en el Teatro Principal.
«No podíamos obviar lo que está pasando en Palestina. La visión del conflicto es intencionalmente manipulada. Miles de palestinos asesinados, que no muertos. El 11-S marca un antes y un después en el mundo árabe y musulmán. Debemos luchar contra la homogeneización y la demonización, así que en Amal damos voz a sus propios creadores para mostrar la realidad en la que viven y la reflexión que hacen. La manipulación es un atentado contra el mundo árabe y el derecho a la información de europeos y occidentales», según afirma Jaber Martínez, hijo de Ghaleb Jaber Ibrahim, un inquieto palestino que hizo Medicina en Santiago y construyó su vida en la ciudad.
La propuesta cinematográfica, que cumple veintiún años, exhibirá cinco películas ambientadas en Marruecos, Túnez, Siria o Palestina, elegidas entre los cientos de cintas que se producen. «Es cine de altísima calidad y diversidad temática, que habla de mujeres, refugiados, mostrando diferentes historias», según indica su director. «Amal tiene un público muy estable. Pensemos que en la ciudad tenemos la suerte de contar con tres festivales que presentan una oferta extraordinaria. Además, con Amal en Ruta hacemos el esfuerzo por salir a otros lugares, donde logramos un gran éxito de participación y asistencia. Amal es más que un evento cinematográfico, es una puerta al intercambio, a la empatía y al entendimiento», añade.
Alta producción audiovisual
La producción audiovisual árabe es «alta», con países cuyo tejido industrial es «muy grande», advierte Jaber Martínez. «En los años 50, Egipto estaba a la par que Hollywood, algo que ayudó a unificar la lengua, porque hacía grandes producciones de cine clásico, tipo Casablanca. Túnez, Marruecos y Libia tienen tradición de coproducciones con países francófonos. La historia colonial ha dejado su huella, países colonizados acaban coproduciendo con sus antiguos colonizadores», según apunta Jaber, que también es productor audiovisual.
Preguntado sobre los gustos del público árabe, señala que son muy similares: «La comedia tiene mucho éxito, es una vía de escape. También hay películas que entran en el circuito de forma casi clandestina. Hay más o menos censura según los países; pero aquí también pasaría, una peli LGTBI en Hungría seguramente no la pondrían». Por otra parte —subraya el director de Amal—, la calidad artística de los actores es extraordinaria, triunfan en series de las plataformas occidentales. «Hiam Abbass, nacida en Nazaret, es la protagonista del último fenómeno de HBO, Sucesión, con éxito de público y crítica. Es un ejemplo de talento árabe que no representa el típico cliché. Incluso llegó a dirigir algún capítulo», destaca el director de Amal, la cita de Compostela con el cine euroárabe que arranca esta noche en el Teatro Principal.