El ciclista vallisoletano del equipo gallego se subió a lo más alto de la general con una renta de 28 segundos
28 jul 2024 . Actualizado a las 19:07 h.El Padronés Cortizo, suma y sigue. Afrontaba el mes de julio como uno de los más exigentes de la temporada y lo cerró con nota tras adjudicarse Dani Cavia la Vuelta a Castilla y León. Los gallegos tuvieron que sudar mucho para asegurar el triunfo final del vallisoletano, el sexto en su palmarés particular este curso.
La Vuelta a Castilla y León arrancó con Maksym Bilyi imponiéndose en Arévalo en la etapa inaugural. Al día siguiente, unos problemas estomacales apartaron al ucraniano de la lucha por los puestos de honor.
Los padroneses resurgieron el viernes cuando Modesto Pérez, director del equipo en la ronda castellana, lanzó al ataque a Dani Cavia en el kilómetro cinco de carrera. Parecía bastante utópico que esa escapada llegase a buen puerto, teniendo en cuenta que restaban más de 160 kilómetros para la meta. Las diferencias con el pelotón se ampliaron, llegando a siete minutos. Dani Cavia y Jordi Artigues se quedaron solos en la aventura camino de la meta para disputar un emocionante duelo que se le escapó por centímetros al corredor del Padronés.
La galopada de Cavia tuvo recompensa. El vigente campeón de la Copa de España pasó a ocupar el segundo puesto de la general con el mismo tiempo que el vencedor de la jornada, situándose con serias opciones de asaltar el liderato en la etapa reina.
El sábado, Cavia le arrebató el maillot rojo a Jordi Artigues, que no fue capaz de seguir el ritmo en las duras rampas que condujeron a la meta. El del Cortizo entró a once segundos y se encaramó a lo más alto de la general con una renta de 28.
La tirada definitiva del domingo, entre Tordesillas e Íscar, se resolvió al esprint. El ruso Skorniakov se anotó el último parcial y Dani Cavia certificó su victoria absoluta en Castilla y León.