Ryanair retirará un avión de su base en el aeropuerto de Santiago y recortará un 28 % sus plazas a partir de abril

S. Lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

Profundiza en sus ajustes para una campaña estival en la que reduce de 10 a 5 las rutas exteriores que operaba hace dos años

16 ene 2025 . Actualizado a las 20:41 h.

Suma y sigue en el tijeretazo que Ryanair lleva dos años aplicando en su operativa en Santiago. El progresivo recorte de servicios que inició en la campaña de invierno del 2023, coincidiendo con la primera temporada baja después del Xacobeo, sufrirá un nuevo episodio a partir de abril, cuando la aerolínea irlandesa reducirá en un 28 % las plazas en los vuelos que opera con origen o destino en el Rosalía de Castro. Es la consecuencia de su decisión de retirar una de las tres aeronaves Boeing 737-800 que ahora tiene en su base de la terminal compostelana.

Así lo anunció este jueves Eddie Wilson, director general de Ryanair, que achaca a unas tasas aeroportuarias que considera excesivas una decisión que la aerolínea de bajo coste también extenderá, en distintos porcentajes, a sus servicios en otras terminales, entre ellas, en Vigo. Este argumento no es nuevo, porque la compañía ya lo esgrimió para justificar sus recortes en el invierno pasado, cuando canceló ocho rutas europeas en Santiago. Como entonces, Aena devuelve la pelota al tejado de Ryanair, y alega que las tasas aeroportuarias en España están congeladas y son de las más bajas de Europa.

El caso es que la sangría en los servicios de la aerolínea que controla el grueso del tráfico comercial de Lavacolla continúa su escalada. A los recortes del invierno pasado le siguió un nuevo tijeretazo para la campaña actual, en la que Ryanair ha rebajado de tres a solo una sus rutas exteriores. Así, después de prescindir de los vuelos directos con París y Milán-Bérgamo, en esta temporada de invierno su oferta internacional se limita a la conexión con Londres (Stansted). Y la misma tónica marca los planes de la aerolínea para el verano. De momento, y a tenor de los destinos para los que está despachando billetes, Ryanair retomará en abril las rutas con Bolonia, Bruselas, Dublín y Memmingen, que se sumarán a los enlaces con la capital británica. De los planes estivales de la compañía se caen París y otra ruta que parecía consolidada en el panel de vuelos del Rosalía de Castro, Milán-Bérgamo.

Esta supresión de rutas es el trazo grueso de un repliegue que limita las frecuencias de Ryanair en la mayoría de los destinos que opera desde el aeropuerto de Santiago, cuyos usuarios verán reducidas de esta manera sus opciones de volar con la compañía a partir de abril.