Los problemas de iluminación unen a la corporación de Santiago en la búsqueda de medidas eficientes
SANTIAGO
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El PP logra el apoyo unánime a su propuesta de mejorar el servicio, aunque el ejecutivo afirma que ya está en sus objetivos
31 ene 2025 . Actualizado a las 16:54 h.El PP llevó ayer al pleno municipal las quejas ciudadanas por la deficiente iluminación en diversos puntos de la ciudad con el objeto de reclamar que se analice y revise la tecnología que se está instalando con el nuevo contrato, que ha supuesto la sustitución de la totalidad de las luminarias del municipio, más de 23.000, y 500 centros de mando. Pese a ello y a la introducción de luminarias led, las quejas de los ciudadanos «crecen semana a semana», según expuso el portavoz popular, lo que no solo implica la existencia de zonas oscuras, sino que alimenta la sensación de inseguridad.
Borja Verea reclamó medidas que mejoren la prestación a través de esa revisión y de la poda de los árboles que tapan las luminarias y arrancó la unanimidad de la corporación, aunque tras admitir el apunte del gobierno de que quizá la poda no sea la medida oportuna en todos los casos, con lo que se estudiarán puntualmente las soluciones donde haya árboles.
El gobierno dijo que se están revisando ya todos los puntos de luz sustituidos. Concluida la fase de reposición en octubre, ahora se está con la de verificación y ajuste, según el concejal de servicios básicos, el nacionalista Xesús Domínguez, quien asumió que el ejecutivo es consciente de que hay puntos deficitarios y que, como ya preveía el nuevo contrato, licitado en el anterior mandato, se están haciendo las mediciones oportunas para introducir las correcciones que sean necesarias y posibles.
El responsable del servicio afirmó que en esas revisiones se están priorizando aquellas zonas «onde a veciñanza manifesta algún tipo de insatisfacción». El Concello está buscando puntos oscuros sobre los que haya que actuar y mirando la intensidad para dar buena cobertura y evitar contrastes que perjudiquen la buena iluminación y generen zonas de sombra, una posibilidad apuntada por la socialista Mila Castro cuando expuso que hay que ir al equilibrio entre una iluminación eficiente pero que también evite una sobreiluminación molesta.
El actual contrato implicaba la sustitución de las luminarias existentes y la instalación de otros 85 puntos, cuya localización se valorará en función de las necesidades. Frente a las críticas de Verea, Domínguez defendió que «estamos actuando e estase mellorando a iluminación en moitos puntos».
Retirada del uso hotelero previsto en las facultades de Xoán XXIII
El pleno, en el que también intervino Marcos Maceira por la plataforma Queremos Galego para demandar apoyo para el gallego, aprobó de forma provisional y por unanimidad la modificación del PXOM que retira el uso hotelero previsto en el planeamiento para las actuales facultades de Maxisterio y Enfermería en Xoán XXIII y resuelve la catalogación de ambos inmuebles, lo que implica su protección como referentes en la ciudad del estilo arquitectónico moderno. El PP invitó a Raxoi a que trate con la USC de darle una segunda vida a ambos edificios, cuando se vayan esas facultades, ante el riesgo de que quede ahí «un cadáver urbanístico».
Los vecinos de Laraño reclaman la implicación del gobierno local en el caso de los paneles del ADIF
Los vecinos de Laraño mostraron ayer a través de su presidente, Julio Fernández, un gran descontento con el gobierno ante su demanda de que no se instalen las pantallas antirruidos del ADIF en la zona por el efecto que tendrá en la iluminación y visibilidad de sus viviendas. Fernández, que intervino ante el pleno a raíz de la proposición formulada por el PP, proclamó que se sienten «desamparados» por el ejecutivo y expresamente por la alcaldesa, a quien Borja Verea interpeló con insistencia sobre si en los últimos meses no había tenido media hora para atender a los residentes de la zona. Desde el gobierno expusieron que no pueden decir al ADIF que incumpla la ley, aunque sí están en conversaciones para tratar de minimizar el impacto de los paneles. La alcaldesa dijo que habían mantenido contacto con el ADIF y que está dispuesta a reunirse con los vecinos cuando consideren. Desde su entorno apuntaron tras el pleno que inicialmente los vecinos habían pedido al Concello que realizase gestiones pero no expresamente una reunión con ella.