Arranca este domingo (17.00 horas) la era Brais Prado en el Atlético Escairón. El técnico lucense se estrena en el banquillo en una auténtica final. Será la que disputarán su equipo y el Arzúa en tierras coruñesas.
Es un partido trascendental, ya que el conjunto coruñés ocupa posiciones de descenso y es rival directo de la escuadra de O Saviñao, que también está en una de esas posiciones.
Sumar una victoria sería importante para los discípulos de Prados, que aventajan en dos puntos a los coruñeses. En caso de que se produjera este resultado, el Escairón se situaría con cinco puntos de ventaja. Si empata seguirían los dos puntos y si sucumbe, el Arzúa lo superaría en la clasificación en un punto.
Brais Prados admite la dificultad del encuentro, pero no descarta la victoria. «Queremos gañar, pero o simple feito de puntuar serviría para cortar a racha de resultados que leva o equipo e un impulso anímico de cara ás vindeiras xornadas», comenta el nuevo entrenador del Atlético Escairón.
La principal novedad del cuadro de O Saviñao de cara a esta final será la presencia del mediapunta Jorge Ospina, que llega al equipo procedente del Oural.
Prados explica las razones que lo llevaron a aceptar la oferta del Atlético Escairón. «Tiña ganas de volver adestrar, e máis despois de dous anos. É un reto diferente que o que tiven en Sarria, porque son contextos distintos», señala Prados.
El técnico chairego admite que la situación en la clasificación de la Preferente es complicada, pero confía en revertir la situación. «Imos traballar para intentar salvar ao Escairón», dice Prados, que confirma que en las próximas horas llegarán como mínimo dos refuerzos.