La Xunta lleva a la Fiscalía el caso de la mujer de Santiago cuya madre impidió la eutanasia

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

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Abogados Cristianos ha presentado una denuncia y reclama medidas cautelarísimas para la paralización cautelar del proceso

03 nov 2023 . Actualizado a las 21:25 h.

La Xunta ha remitido a la Fiscalía el caso de una mujer de Santiago de 54 años de edad y enferma de esclerosis desde los veinte a la que su madre impide que se le practique la eutanasia que tenía aprobada y programada para el pasado jueves. Ese día, cuando los profesionales sanitarios acudieron a su domicilio para llevarla en ambulancia al Hospital Clínico compostelano, la progenitora, de 79 años, les denegó el acceso y rechazó abrirles la puerta.

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, ha confirmado que la Fiscalía ya está investigando el asunto y pide «respetar la voluntad de la paciente y también el trabajo de los profesionales sanitarios y ser sensibles a la opinión del familiar». La mujer ya fue evaluada por el comité médico que debe autorizar la eutanasia, procedimiento al que dio su visto bueno por sostener que padece dolores insoportables, dificultad para deglutir y problemas de movilidad.

La entidad Abogados Cristianos ha actuado en este asunto presentando una denuncia en el Juzgado de Instrucción número 2 de Santiago en la que solicita medidas cautelarísimas para paralizar el proceso de eutanasia, tal y como pide la madre de la enferma. Sostienen que el informe que autorizó la muerte programada de esta compostelana «no es real y está lleno de falsedades», señala la letrada María Riesco.

Desde Abogados Cristianos se pone en duda el estado crítico de la mujer que ha solicitado la eutanasia y niegan que tenga dificultades para comer o que tenga dolores permanentes. «De hecho, ni toma ni tiene recetados analgésicos», afirma María Riesco. En su opinión, y por el relato del caso que les ha hecho la madre, consideran que esta compostelana puede haber caído en una depresión fruto de no hacerse a la idea de tener que usar de modo permanente una silla de ruedas desde que, durante la pandemia, sufrió el coronavirus. «A la eutanasia no se le puede dar marcha atrás, de ahí que hayamos solicitado medidas cautelarísimas en el juzgado, porque creemos que estar mujer debería ser atendida antes por psicólogos o psiquiatras para que evalúen su estado», añade la letrada del colectivo que está al frente del caso.

Comesaña garantiza que en Galicia «la ley de eutanasia se cumple al pie de la letra» y que en este caso se han cumplido con «todas las garantías». En concreto, al asesoramiento de personal sanitario y a la evaluación de la comisión. Al negar la madre la entrada de los sanitarios a su domicilio, la Xunta ha decidido recurrir a la Fiscalía «para que los jueces tomen la decisión correspondiente», señala el conselleiro de Sanidade.