Muere Carolina, la gata más famosa entre los universitarios de Santiago: «Ya no tengo motivos para volver a pisar la Conchi»
VIVIR SANTIAGO

La esquina de la biblioteca en la que siempre se tumbaba al sol amaneció hoy con una nota escrita en papel: «Sentimos comunicar que ha fallecido esta noche por causas naturales». «En época de exámenes había cola para acariciarla», recuerdan algunos
05 ene 2024 . Actualizado a las 17:10 h.Al salir de la biblioteca Concepción Arenal —conocida popularmente como la Conchi— y antes de volver a casa, los estudiantes se dirigían hacia el edificio del Csic. En esa esquina de la rúa dos Feans vivía Carolina, la gata más popular entre los universitarios de Santiago. Acariciarle la cabeza y darle de comer, decían, les daba suerte para los exámenes. «Al llegar siempre veías a alguien con ella. En época de finales, era raro que no hubiera algo de cola», recuerda una usuaria de la biblioteca. Aunque se desplazaba de un punto a otro del recinto en función de dónde diera el sol, Carolina siempre estaba allí, detrás de la valla. Después de años y convertida ya en una tradición, la ciudad se despertó hoy con una noticia: «Sentimos comunicaros que la gatita Carolina ha fallecido esta noche por causas naturales».
Es la nota que hoy dejaron pegada en la misma esquina en la que se solía encontrar al animal. En plena época de finales, los estudiantes que acudieron esta mañana para verla y que les diera suerte, se encontraron con la fatal noticia. Escrita en un pequeño papel a tinta roja, no tardó en viralizarse en las redes sociales. «Ya no está Carolina, el año empieza horrible», escribía una usuaria a través de X, plataforma conocida anteriormente como Twitter. «Si Carolina no está, yo no tengo motivos para volver a pisar la Conchi», continuaba otra. Así, un cúmulo de jóvenes comenzaron a lamentar la pérdida: «Día arruinado», «Dios mío, me niego a creerlo», «No puede ser», «Santiago nunca volverá a ser la misma», «Considero que se debería de poner una estatua en su honor», y, en la misma estela de estos comentarios, un largo etcétera más.

Y es que Carolina no era una gata cualquiera, sino un emblema más del mundo universitario y de la vida en la ciudad. «Llevaba siempre chucherías de gato en la mochila para darle de comer en los descansos de la biblioteca y siempre nos seguía a través de la valla para que no paráramos de acariciarla», recuerda una joven. Tal era la devoción que, al enterarse del fallecimiento, la comunidad más grande de universitarios en Santiago, la cuenta conocida como @salseo_usc, proponía en sus historias de Instagram «hacerle el homenaje que se merece». Su publicación, que recopila una serie de vídeos antiguos de la gata, suma ya más de 5.000 me gusta y cientos de comentarios.
Tal era la devoción que en Google Maps se creó una etiqueta específica marcando el lugar en el que la gata solía tumbarse al sol. Con «Carolina aka Michi de la Conchi», un gran punto rojo señala esa esquina del Csic. Al igual que si se tratara de una cafetería, de un restaurante o de una tienda, los que pasaban por allí podían subir sus valoraciones a la plataforma. Todas las reseñas iban acompañadas de cinco estrellas. «Es el único motivo por el que consigo sobrevivir año tras año a la época de estudio en la Conchi», «La mejor, me alegra todos los días yendo a clase» o «Muy ronroneante» son algunos de los comentarios que se podían leer navegando por internet.