El actor Antonio Garrido, icono en la Semana Santa de Sevilla y vecino de Santiago: «Se ha malentendido la polémica con el cartel»
VIVIR SANTIAGO
El intérprete, que triunfa con la simpática y rompedora serie de humor cofrade «El Parlemasso», se moja en la controversia que divide a la opinión pública
29 ene 2024 . Actualizado a las 14:36 h.Hoy regresará a Santiago, donde se asentó en el año 2011, pero este fin de semana pudo comprobar en su ciudad, Sevilla, que en la capital andaluza -una de las localidades que con más pasión vive la Semana Santa- casi todas las conversaciones giran desde el sábado en torno al polémico cartel que el pintor Salustiano García creó para anunciar las procesiones del 2024 y en el que, con su hijo como modelo, mostró la imagen de un joven Jesucristo resucitado, cubierto levemente de cintura para abajo.
«Ayer hubo una media maratón en Sevilla, pero de lo que todo el mundo hablaba del cartel», confirma el conocido intérprete Antonio Garrido, uno de los máximos expertos y apasionados de su Semana Santa.
Hijo de José Luis Garrido, uno de sus grandes pregoneros de la fiesta, Antonio Garrido es además coautor de la exitosa serie de humor cofrade El Palermasso, con la que trata la fiesta más importante de su ciudad con un humor fresco y actual. Con ese espíritu, y con templanza, valora el intenso revuelo generado, sobre todo en redes sociales, donde, nada más ser presentado el cartel por el Consejo de Hermandades y Cofradías de Sevilla ante un auditorio lleno, comenzó a calificarse como «Una vergüenza», «Rompedor», «Ni es el Orgullo ni Cristo resucitó en una sauna gay» o «Estéticamente bello y para nada irreverente», relacionándolo incluso algunos usuarios con Podemos o el colectivo LGTBI.
«Yo creo que, también en varios medios, se ha malentendido la polémica con el cartel. Los reproches no son, como se ha dicho, porque aparezca más desnudo o porque alguien haya querido ver una identificación homosexual en él. Más allá de lo que se pueda decir en redes, y que vende mucho, ahí no está el debate. La principal crítica que se hace desde los cofrades es que ese cartel tanto puede representar a la Semana Santa de Sevilla, como de Cádiz, Nueva York o Ferrol. Tiene dos pequeños detalles que sí son propios de la capital andaluza, como son el sudario, que es una copia del que luce el Cristo de El Cachorro, muy conocido en la ciudad, o las potencias que incluye, y que aluden a las del Cristo del Amor, también muy querido en ella. Pero hay que ser muy erudito -«o friki como yo, bromea»- para reconocerlo», razona.
«El cartel debe ser como un grito en la pared para que al que lo vea le sugiera o le entren ya ganas de venir a Sevilla; y ahí está el problema, que no queda tan claro. Ni el turista lo identificará con la Semana Santa de Sevilla, ni el sevillano se ve representado. Otro hándicap, pero que también entendemos los de aquí, es que el Cristo que se representa es un Cristo resucitado, una imagen más propia de las glorias -las procesiones pequeñas que empiezan tras la Semana Santa y se mantienen hasta octubre- que de la Semana Santa», reflexiona el actor sevillano.
«Aún así, algo que está claro es que el Consejo de Hermandades y Cofradías encargó la obra sabiendo la trayectoria y el estilo del pintor Salustiano García y me parece maravilloso que el artista no se haya prostituido para contentar a nadie, que haya sido fiel a su espíritu», defiende el actor, reconociendo sin dudarlo su obra. «A mí personalmente el cartel no me gusta demasiado, pero no comparto para nada la iniciativa de recoger firmas para prescindir del mismo», contrapone.
El actor aclara que aunque los sketchs de El Palermasso -la web serie de humor dedicada a la Semana Santa de Sevilla, una iniciativa que en los últimos años fue llevada incluso a función, llenando teatros-, los arranca junto a varios compañeros el miércoles de ceniza, ante la polémica generada, y estando este fin de semana en su ciudad, los cuatro quisieron grabar un pequeño vídeo, publicado esta mañana.
En él, y cubiertos también levemente de pintura para abajo, ironizan con que ellos no habían visto el cartel. «No nos posicionamos demasiado. Vas a ver cómo habrá gente que diga que menos mal que hicimos este guiño a favor, mientras que otros nos reprochen: ‘’¡Hay que ver...’!’», comenta ya entre risas el actor. Nada más publicarse la grabación, todos los comentarios lo que alaban es su humor.
Desde el 2011 en Santiago
El actor, que cada vez suma más proyección en Galicia, tanto en películas como en programas de la TVG, como, Land Rober, donde ya hace tiempo aceptó en antena el reto de hacer sketchs en gallego, es un rostro muy conocido a nivel nacional. Tras más de 30 años sobre las tablas, suma protagonismo tanto en obras de teatro, como en largometrajes o conocidas series, como Los Simuladores, de Cuatro o Los Protegidos de Antena 3, una presencia que, junto a su faceta de presentador de programas televisivos, le han valido el reconocimiento y el aprecio del público.
En Santiago se asentó en el 2011, tras presentar en el cambio de año las campanadas -el 2010 fue Xacobeo- y conocer esa misma noche en Compostela a la que sería su mujer. Desde ese momento, su vida trascurre entre Santiago, Porto do Son -donde veranea-, las ciudades donde graba o Sevilla, a la que siempre vuelve en Semana Santa. «Me gusta tanto la Semana Santa de Sevilla que en los contratos ya aclaro que no trabajo en esas fechas», resalta.
El autor del cartel de la Semana Santa de Sevilla: «No es ni revolucionario ni sucio»
El cartel de la Semana Santa de Sevilla 2024 no es ni revolucionario, ni sucio, según asegura su autor, Salustiano García, quien considera que si alguien ve en su cuadro algo sucio es «su propia suciedad interna la que está proyectando en la imagen».
En una entrevista con Efe, después de la polémica suscitada tras la presentación del cartel, que ha generado tanto halagos como críticas, ha indicado que «mi intención a la hora de realizar el cartel era anunciar la Semana Santa, que es la función de cualquier cartel».
«En mi caso concreto, quise centrarme en su parte más luminosa, la Resurrección. Y luego ser fiel a mi estilo, que es trabajar con personas, con seres vivos y no copiar imágenes», ha expliclado.
Una vez que tenía clara la idea, estuvo buscando un modelo que le ayudase a «contar toda la bondad, la majestad y la paz que hay después de la muerte» y trabajó la postura y los diferentes elementos que le iba a incorporar como las potencias del Cristo del Amor o el paño de pureza de 'El Cachorro'.
«Hice con intención un Cristo joven, bello, sin marcas ya casi de su tortura, porque lo que quería representar es al Dios que hay en Cristo, ya su parte de hombre la ha dejado en la tierra y ahora ya está preparado para ser 100 % Dios y un Dios», ha indicado.
Su forma de trabajar es metódica, lo primero que hizo fue estudiar todo lo que se ha hecho en los dos últimos siglos y no descartar ninguna idea. Sin embargo, la idea «se fue destacando por sí sola, ya que cuando pensé que tenía que ser un cuadro de Salustiano, no quedaba más remedio que representar una figura viva y la única figura viva que podía representar era Cristo Resucitado», ha defendido.
Por su estilo y la propia concepción del cuadro le sorprende la polémica que está generando: «Algunos medios de comunicación han dicho que es revolucionario, y no lo es porque yo no quería hacerlo, quería hacer un cuadro amable y respetuoso con la entidad que me lo ha encargado», en referencia, al Consejo de Hermandades y Cofradías de Sevilla.