«No es este el presupuesto que me hubiera gustado presentar. Pero no va faltar esfuerzo, trabajo y dedicación para que la I+D pueda crecer». La secretaria de Estado, Carmen Vela, casi que se tuvo que disculpar ayer en el congreso cuando presentó las partidas para ciencia e innovación. Se justificó de nuevo en el momento económico por el que atraviesa España, que obliga a fuertes recortes también en su área, pero sus argumentos no convencieron a la oposición, que la acusó de presentar unos presupuestos maquillados,
Muy duro fue el portavoz socialista de Innovación, el gallego Miguel Cortizo, quien subrayó que queda claro que la prioridad para el gobierno «son los bancos, para los que se pueden movilizar millones de euros para su rescate», y no la ciencia. Sobre el aumento de los créditos denunció que «incrementar lo que no se gasta» solo se hizo para «salvar la cara a unos presupuestos que son la mayor agresión sufrida por la I+D+i en la historia de la democracia».
Amaya Moro, de la Plataforma de Investigación Digna, incidió en el «absurdo» de aumentar los créditos, ya que «el año pasado se dejaron sin gastar 1.300 millones y en el 2013 no se ejecutarán los 2.748 presupuestados ni en el mejor de los escenarios».
Del recorte tampoco se han librado los siete organismos públicos de investigación del Estado, que verán disminuido su presupuesto en una media del 4 %. El más perjudicado en esta ocasión ha sido el Instituto Español de Oceanografía, con un 11, 7 %. El CSIC, finalmente, solo perderá un 1,6 %.