Sonda Philae: Los rebotes tras el aterrizaje podrían haberla trasladado a un kilómetro de su destino en una zona de sombra
SOCIEDAD
El robot protagonizó el miércoles un aterrizaje histórico sobre un cometa. Pese a que los arpones para anclarlo en la superficie no funcionan, se mantiene estable. Sin embargo, los rebotes tras el aterrizaje podrían haber trasladado al módulo a un kilómetro de su destino en una zona de sombra, por lo que recibe poca energía solar como para continuar con las pruebas científicas
13 nov 2014 . Actualizado a las 20:18 h.Watch @Philae2014's decent in this animation of images from @ESA_Rosetta'sOSIRIS camera #CometLanding http://t.co/cRWZtLtnaW
— ESA (@esa) noviembre 13, 2014
Tres aterrizajesLa Agencia Espacial Europea (ESA) ha confirmado además que la Sonda Philae aterrizó en tres ocasiones. Es decir, que el fallo en los arpones provocó que el módulo rebotara varias veces hasta aferrarse definitivamente a la superficie. «Los análisis magnéticos revelan 3 aterrizajes a las 15:33, 17:26 y 17:33 UTC», escibió la ESA en su cuenta de Twitter @esaoperations, un mensaje que también se ha comunicado a través de la cuenta de la Sonda Philae (@Philae2014). Según se ha desprendido de las informaciones llegadas del motor aterrizador de la sonda Philae, el primero de los «saltos» duró una hora y 50 minutos, durante los cuales la sonda se desplazó a 38 centímetros por segundo. El segundo bote fue algo más pequeño: se desplazó a 3 centímetros por segundo durante 7 minutos.Hello! An update on life on #67P - Yesterday was exhausting! I actually performed 3 landings,15:33, 17:26 & 17:33 UTC. Stay tuned for more
— Philae Lander (@Philae2014) noviembre 13, 2014
Debido a estos tres rebotes, y según ha confirmado la ESA, la sonda Philae no se encontraría en Agilkia, sino en una zona que se podría corresponder con el «punto B» -una de las cinco zonas que barajó inicialmente-. Ulamec: @Philae2014 thought to be in blue area, 1st touchdown close to planned landing site (in red) #CometLanding pic.twitter.com/3TjkChhKoX
— ESA (@esa) noviembre 13, 2014
En la rueda de prensa, se ha indicado que el robot de Rosetta aterrizó «con gran precisión» en el lugar elegido y después sufrió dos rebotes, pero, al no funcionar los arpones y rebotar, terminó en otra parte del cometa. A este inconveniente, también se suma el hecho de que Philae se encuentra en una sombra. «Quedamos a la sombra de un acantilado», explicó a la prensa el astrofísico Jean Pierre Bibring. Este hecho podría poner el peligro el funcionamiento de los paneles solares, por lo que los científicos europeos están trabando para solucionar este nuevo inconvenientes. I’m in the shadow of a cliff on #67P. Where exactly? That’s what my team is in the process of finding out! #CometLanding
— Philae Lander (@Philae2014) noviembre 13, 2014
La ESA esperaba que la sonda Philae tuviera entre 6 y 7 horas de luz solar al día pero sólo recibe hora y media, explicó a Efe el jefe del Departamento de Ingeniería de Sistemas de Tierra de la agencia, Juan Miró. El módulo lleva una batería que le da autonomía energética hasta dos días y después lo que le queda de vida depende de los paneles solares.Este descontrol ha provocado también que la sonda Philae no esté colocada como los investigadores esperaban. En este sentido, el manager del aterrizaje en el centro de control de la ESA, Stephan Ulamec, ha indicado que el robot no está en paralelo a la superficie y que estaría anclada «sólo con dos de sus patas». Ulamec ha indicado que el equipo de la misión está trabajando para modificar su posición «en las próximas horas». El cuerpo del aparato puede girar hasta 8 grados, lo que también solucionaría, en parte, los problemas relacionados con la iluminación.La superficie de la sonda Philae está recubierta de paneles solares con los que recoge energía para realizar su trabajo. La ESA esperaba que las horas de luz estuvieran alrededor de las siete. Ahora, han reconocido que en el nuevo lugar de aterrizaje sólo cuentan «con una hora». Actualmente, se está utilizando una segunda batería que no necesita tanta energía, lo que ha permitido obtener los primeros datos. «Las condiciones no son las ideales, pero todos los instrumentos están funcionando y muchas mediciones están en progreso», ha reconocido el científico.Esta información confirma las primeras sospechas del equipo de la misión Rosetta. Este miércoles, el manager del aterrizaje en el centro de control Stephan Ulamec ya apuntaba a la posibilidad de que se hubiera producido un rebote del aparato. «Puede que no hayamos aterrizado una vez, sino dos veces», declaró en la tarde del miércoles y se ha confirmado este jueves.Primeras fotografíasA pesar de todos los inconvenientes, los científicos de la agencia espacial ya han recibido las primeras imágenes de la misión Rosetta. Una, obtenida desde la nave Rosetta, muestra a la sonda Philae en su nueva ubicación y «haciendo acrobacias» sujeta por sus dos patas. Mientras, la propia sonda ha captado numerosas fotografías, las más destacadas las que recogen lo que hay «bajo sus pies» y otra del horizonte. «Es la primera fotografía sacada desde un cometa», ha recordado Ulamec.Now that I’m safely on the ground, here is what my new home #67P looks like from where I am. #CometLanding pic.twitter.com/gFmt8Ldvpa
— Philae Lander (@Philae2014) noviembre 13, 2014
The view is absolutely breathtaking ESA_Rosetta! Unlike anything I've ever seen #CometLanding pic.twitter.com/flsSdxz0bo
— Philae Lander (@Philae2014) noviembre 13, 2014
Gracias a estas imágenes de la sonda Philae se ha podido sabe que el aterrizaje se ha realizado en una superficie de material polvoriento y que la textura de este cometa es rocosa con polvo alrededor. Los expertos han explicado que hay más fotografías que se están procesando, aunque no se podrán hacer públicas debido a los problemas de comunicación existentes entre el módulo y Rosetta.Good thinking to wear a yellow hat and wave a flag @philae2014 - much easier to see you ;) #CometLanding pic.twitter.com/WwdGbW4HhR
— ESA Rosetta Mission (@ESA_Rosetta) noviembre 13, 2014
En cuanto al núcleo del cometa, «todas las teorías» apuntaban a que se trataba de una «bola de nieve sucia, más bien compacta». Ahora los científicos saben gracias a Philae que se trata de una superficie «totalmente accidentada». «Allí donde esperábamos una superficie blanda, encontramos hielo» duro, ha agregado Le Gall sobre una roca que ya se sabe que huele a huevo podrido, establo, almendras amargas y alcohol por la combinación de gases que emite.