Al encuentro, sobre el que giran toda clase de teorías conspiratorias, asistirá este año el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez
10 jun 2015 . Actualizado a las 21:01 h.Hermético, misterioso y exclusivo. Sobre todo muy exclusivo. El Club Bilderberg se ha convertido en los últimos años en uno de los eventos que más interés genera a lo largo del mundo. No es para menos, porque el poderoso grupo de personalidades que cada año desfilan por esta peculiar alfombra roja no es, ni por asomo, lo que más llama la atención del encuentro.
Todas las teorías conspiratorias que giran al rededor de esta organización secreta han conseguido elevar al Club Bilderberg a la categoría de leyenda. ¿Y si la historia tal y como nos la contaron fuera una gran mentira? Porque de ellos se ha llegado a decir que mueven los hilos del devenir de la sociedad, y hay quien se ha atrevido a dar un paso más al asegurar que presidentes del Gobierno o incluso las recientes abdicaciones han sido manejadas, cual burdas marionetas, por sus multimillonarias manos.
Esta elitista camarilla, entre la que se encuentra la flor y nata del sector financiero y político, se reunirá a partir de este jueves en un lujoso hotel situado en una perdida localidad de Austria. 140 participantes de una veintena de países discutirán, a puerta cerrada (y sellada a cal y canto), la agenda que marcará los desafíos que se presentan en el futuro en todo el mundo. Y sin embargo, el mundo, no sabrá nada de ello. El hecho de que los invitados no puedan llevar acompañantes ni vehículo propio, da algunas pistas sobre el secretismo que lo rodea. Conocido como «el club secreto que elige a los líderes mundiales», este foro se creó en 1954 en Holanda, en el Hotel Bilderberg, del que heredó su nombre y su tradición (los encuentros solo se celebran en hoteles). Promovido por el emigrante judío y consejero político Jozef Retinger, el objetivo inicial de este inocente grupo era el de propiciar la comunicación entre líderes políticos, empresarios, académicos y periodistas de Estados Unidos y Europa.
Con el paso del tiempo, la leyenda acabó alimentándolo hasta convertirlo en uno de los actos más estudiados. Algunos mitos aseguran que ningún presidente norteamericano ha sido capaz de ingresar en la Casa Blanca sin haber asistido antes a una reunión del Club Bilderberg. John F. Kennedy, James Carter, Bill Clinton y Barack Obama acudieron a las selectas reuniones antes de llegar al despacho oval. Lo mismo sucedió con Margaret Thatcher, quien tuvo el honor de participar en el año 1975 para un lustro después instalarse en el número 10 de Downing Street. No en vano, la presencia este año de Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, y la ausencia de Mariano Rajoy, actual presidente del Gobierno, han dado pie a toda clase de teorías y conjeturas.
La periodista sevillana Cristina Martín Jiménez ha conseguido avivar la llama del misterio. Considerada una experta en el tema, Martín publicaba su libro Los planes secretos del Club Bilderberg para España, con un sinfín de conexiones entre los hitos de la historia española más reciente y sus intrigantes reuniones. Para ponernos en situación, una simple frase: «El club Bilderberg guionizó la primera transición política española y ahora está guionizando la segunda».
Pero, ¿quién es el Club Bilderberg? Según los pocos datos que se conocen, el 30 % de los miembros de este selecto lobby son permanentes y el resto -de entre los 120 y los 150 invitados- cambia cada año según los temas que se vayan a tratar en cada reunión. Este año, por ejemplo, el encuentro contará con tres rostros españoles: la presidenta del Banco Santander, Ana Botín; el presidente del Grupo Prisa, Juan Luis Cebrián, y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, quien, según Cristina Martín, se enfrentará a su examen definitivo. De este fin de semana depende su posible futuro como presidente del Gobierno de España.
Lo que sí sabemos son los temas oficiales que tratarán en sus reuniones. Según informa la propia organización en su página web -en la que también se puede consultar la lista de invitados- el Club Bilderberg hablará este año de Grecia, Irán, Rusia, Reino Unido, Estados Unidos, Oriente Próximo, la estrategia europea, el tratado comercial con EE.UU., la OTAN, la ciberseguridad, las armas químicas, la globalización y la creciente amenaza del terrorismo. Viendo los temas, es sorprendente el halo de mutismo que lo rodea; una circunstancia que ellos mismos justifican alegando que el secretismo propicia que los participantes no estén sujetos a las convenciones de sus cargos.