Junto a la reina Sofía, respaldó a la Cruz Roja en el Día de la Banderita
02 oct 2015 . Actualizado a las 17:29 h.Un año más, la Reina Letizia y doña Sofía han cumplido hoy con la costumbre de respaldar a Cruz Roja en el Día de la Banderita, al presidir dos mesas de cuestación ubicadas ante el Congreso y en la Puerta del Sol, a las que han acudido centenares de ciudadanos para hacer sus aportaciones solidarias a la entidad. Una hora ha permanecido doña Letizia al frente de la mesa situada al lado de la escalinata principal del Congreso, acompañada por el presidente de la Cámara, Jesús Posada, el secretario cuarto de la Mesa, Teófilo de Luis, y el presidente de Cruz Roja, Javier Senent.
La presencia de la Reina ha suscitado abundantes anécdotas, sobre todo por el interés de la mayoría de los donantes en no marcharse de la mesa sin haberse hecho alguna fotografía o selfis junto a ella. Como la madre de una bebé de tan solo un mes, llamada Nara, que no ha dudado en entregar la niña en brazos de la Reina mientras los fotógrafos no paraban de disparar sus cámaras a discreción.
Luego ha contado que doña Letizia le ha dicho que le encantan los bebés, hasta el punto de que se «quedaría» con la niña que en esos momentos tenía en brazos, y ha asegurado que, cuando le ha preguntado si no se animaba a tener otro hijo, la Reina ha contestado: «De momento, no».
Además, han sido variados los regalos que ha recibido, desde unos bombones de unas señoras a las que les ha parecido «majísima» hasta unas rosas rojas entregadas por unos niños.
El padre Ángel, fundador de Mensajeros de la Paz, algunos diputados -pocos, porque hoy no hay actividad parlamentaria en el Congreso-, alumnos de colegios e incluso de alguna guardería han pasado también por la mesa petitoria.
No ha faltado un cuarteto de moteros, del club madrileño de Harley Davidson, que ningún año dejan de acudir a su cita con la cuestación del Día de la Banderita y con los que doña Letizia ha pasado un buen rato charlando, antes de que se hicieran la foto de rigor.
Tras depositar su donativo, el padre Ángel ha destacado que se trata de un acto de «solidaridad» necesario, que «hay que resaltar las cosas buenas y no las malas», y ha recordado la necesidad de ayudar a los refugiados en Europa, tal y como ha podido comprobar él mismo en un reciente viaje a Budapest (Hungría).
El fundador de Mensajeros de la Paz ha repetido donativo más tarde en la mesa de cuestación que presidía la Reina Sofía en la Puerta del Sol, ante la sede del Gobierno regional, al igual que un sonriente grupo de representantes de la comunidad china en Madrid, que también han guardado cola allí para contribuir por segunda vez a la causa de Cruz Roja, después de haberlo hecho ante doña Letizia.
Acompañada durante la primera media hora por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, doña Sofía ha sido recibida en la Puerta del Sol entre sonoras voces de «¡Viva la Reina!» por los viandantes sorprendidos con su presencia en esta concurrida plaza, mientras madrileños y turistas se disputaban los mejores lugares para tomar fotos con sus teléfonos móviles.
También los privilegiados ocupantes de la planta superior de uno de los autobuses turísticos que recorren el centro han tenido ocasión de captar buenas imágenes de la Reina Sofía, ante quien han desfilado donantes durante unas dos horas, entre ellos numerosos escolares de uniforme a los que ha dedicado gran atención y ha obsequiado con caramelos.
La Cruz Roja, que este año ha instalado más de cien mesas en los puntos más estratégicos de la Comunidad de Madrid, dedicará los fondos obtenidos a las personas refugiadas en Europa.
El presidente de esta ONG, Javier Senent, ha explicado que en 2014 la organización atendió a 5,5 millones de personas en España y ha subrayado la necesidad de que «la sociedad sienta a la Cruz Roja como suya» y que los ciudadanos se pongan en lugar de los desplazados obligados a huir de su propio país porque sus vidas corren peligro.
En este sentido, ha recordado que la entidad se está preparando para acoger a los refugiados de los que España se va a hacer cargo y que también está aportando material y personal médico, sanitario y técnico a las áreas de Europa donde hacen falta, como ha ocurrido en el sur de Grecia.
Su mayor preocupación ahora, ha apuntado, es el efecto que puede provocar la llegada del invierno en las áreas de Centroeuropa donde están los refugiados.