Esta bióloga, del grupo de terapia celular y medicina regenerativa, crea modelos in vitro para estudiar enfermedades como la osteoartrosis y la progeria
24 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.María Arufe acaba de llegar al laboratorio ubicado en el Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) donde investiga el grupo de Terapia Celular y Medicina Regenerativa, pero reserva unos minutos para hablar de un trabajo que no solo le gusta, le fascina. Eso se nota en su modo de explicar lo que hace. En ese laboratorio es donde esta bióloga y profesora del Departamento de Fisioterapia, Ciencias Biomédicas y Medicina de la Universidad de A Coruña desde el 2006 investiga el envejecimiento con células madre extraídas del cordón umbilical. Con ellas, explica, «tratamos de crear modelos in vitro para estudiar dos enfermedades asociadas al envejecimiento, la osteoartrosis (OA) y otra, muy rara, que es la progeria Hutchinson-Gilford y que acelera el envejecimiento del que la padece tanto que no llegan a los veinte años». De ello hablará esta tarde en la conferencia gratuita que ofrecerá hoy a las 19.30 horas, en el salón de actos del Muncyt, de A Coruña, dentro del ciclo CorBi Citizen Science.
-¿Qué ventajas tiene investigar con estas células madre del estroma del cordón umbilical?
-Las células madre ayudan a saber cómo envejecemos. Son muy versátiles. Puedes crear modelos muy específicos modificando el ambiente en la que las cultivas. Puedes alcanzar conocimientos más rápidos que usando modelos con animales.
-¿Cuál es el objetivo final?
-Conocer más sobre esas patologías para poder tratarlas usando terapia celular y que, por ejemplo, en el caso de la artrosis estas puedan actuar en el lugar donde está lesionado el cartílago. Porque el envejecimiento es algo que nos afecta a todos. Ourense y Lugo están entre las diez regiones europeas más envejecidas.
-Es curioso que haya elegido para estudiar esto una enfermedad muy rara y otra que es muy común entre la población. ¿Por qué?
-Aunque la primera afecta a un caso de entre cuatro y ocho millones de personas. La otra a un 80 % de los mayores de 65 años, hay muchos puntos que tienen en común las dos patologías.
-¿Cuáles son?
-La existencia de unos marcadores que aparecen elevados en ambas. ¿Por qué se dan?
-¿Cree que pronto esas células podrán aplicarse en terapias para curar o también mejorar esas enfermedades relacionadas con el envejecimiento?
-A medio o largo plazo no veo por qué no. Las células madre, que, como sabemos, producen poco rechazo el huésped, podrían utilizar para reemplazar a las que mueren o acaban dañadas por el paso del tiempo.