La joven había dado el nombre de este hombre a Recursos Humanos la semana pasada
31 may 2019 . Actualizado a las 22:26 h.La Policía Nacional está investigando a un nuevo sospechoso de difundir el vídeo sexual en el que aparecía una trabajadora de Iveco, que finalmente se suicidó. Según informó el diario El País, el hombre que ahora investigan es el mismo del que se quejó la joven ante Recursos Humanos la semana pasada, donde aseguró que se sentía humillada por la difusión del vídeo entre sus compañeros. Parece que este segundo investigado también es expareja de la mujer, igual que el hombre que el jueves se presentó voluntariamente en el cuartel de la Guardia Civil y finalmente quedó en libertad sin cargos.
Una unidad especializada está analizando el móvil de la primera expareja, que se presentó voluntariamente ante las autoridades. Fuentes próximas a la investigación han asegurado a Efe que el hombre entregó su teléfono móvil a la Policía y respondió a las preguntas de los agentes, sin que estos encontraran ningún indicio de criminalidad para imputarle delito, por lo que quedó en libertad y por el momento no se ha tomado medida alguna contra él.
Ahora, los agentes encargados del caso analizan de forma exhaustiva su móvil y no descartan tomar declaración a otros trabajadores de la planta de Iveco, en Alcalá de Henares (Madrid), donde la mujer trabajaba, han indicado a Efe las fuentes. Su expareja se presentó este jueves a las cuatro de la tarde en el cuartel de la Guardia Civil en Mejorada del Campo, en Madrid, localidad en la que reside, pero fue puesto a disposición de la Policía, que investiga el caso.
«Jamás se debe reenviar un vídeo de este tipo»
Por otra parte, el inspector de Policía Nacional y delegado de Participación Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Murcia, Gonzalo Álvarez, ha advertido que «jamás se debe reenviar» un vídeo que implique ciberacoso, en caso de recibir este tipo de contenido en el móvil u otras plataformas, porque constituye un delito.
Álvarez ha hecho estas declaraciones durante el acto de presentación de la campaña de prevención El ciberacoso está conectado, reconócelo, al ser preguntado por el caso de la trabajadora de Iveco que se quitó la vida el pasado sábado tras difundirse un vídeo de contenido sexual suyo entre sus compañeros de trabajo.
En concreto, Álvarez ha advertido de forma tajante que difundir este tipo de vídeos es delito, porque «la intimidad, lógicamente, nos pertenece a las personas». En casos como el de Iveco, advierte que «si recibimos el vídeo y lo reenviamos, estamos cometiendo un delito; es algo que no se puede hacer, está tipificado y penado», corrobora.
«En general, todos sabemos lo que está bien y lo que está mal, y las cosas no han de ser delito para no hacerlas», según este inspector de la Policía Nacional, quien destaca que «todos sabemos que eso está mal».