Ahora se ha sabido que hubo positivos por la bacteria en marzo; la ministra Carcedo admite una «cadena de errores» en su comparecencia en el Congreso
05 sep 2019 . Actualizado a las 21:46 h.Nueva vuelta de tuerca en la crisis de la listeriosis. Ahora se investiga si la cepa causante del brote pudo estar circulando ya a comienzos de año, como apunta la existencia de positivos de varios enfermos en marzo. El sistema no ha podido garantizar la seguridad alimentaria. El Ministerio de Sanidad propondrá a las autonomías revisar los sistemas de alerta y protocolos contra la listeria después del brote surgido en Andalucía tras el consumo de carne mechada, que se ha cobrado la vida de tres personas en todo el país y ha provocado seis abortos. La ministra María Luisa Carcedo entiende que aunque las redes de alerta han funcionado, también se han detectado «errores» por parte de las administraciones con las competencias de control sanitario en la producción y manipulación de alimentos, de ahí la necesidad de «analizar la posibilidad de mejora».
Carcedo compareció en el Congreso para dar cuenta de la gestión del Ejecutivo central en la emergencia sanitaria, pese a que el grueso de las competencias recae en las comunidades autónomas. Al igual que ocurrió en Andalucía, la listeriosis se ha convertido en arma de confrontación política, de ahí que la ministra no eludiera las puyas al gobierno regional del PP y Cs al apuntar que «la calidad y oportunidad de la información que la Junta de Andalucía ha ido proporcionando a la red de alertas ha mejorado a lo largo de la crisis». «Una mejora que coincide con la remisión del brote», lanzó para defenderse de los ataques de la oposición a la falta de coordinación con la Junta y los fallos de comunicación. No obstante, aludió a la responsabilidad de la propia empresa fabricante, la sevillana Magrudis, sobre la que se analiza ahora su funcionamiento y sistemas de autocontrol de análisis en puntos de riesgo.
En el caso del Ministerio, tras ser notificado el caso el 16 de agosto, se activaron «inmediatamente» las dos redes de alertas sanitarias a fin de informar a otras comunidades sobre la posible aparición de casos y para localizar e inmovilizar el producto contaminado que les pudiera haber llegado. «La red nacional de alertas ha estado vigilante y ha trabajado para la adecuada asistencia a los afectados y para eliminar los riesgos asociados al brote», subrayó Carcedo, concediendo que «debemos analizar cualquier posibilidad de mejorarla».
En este sentido, la ministra adelantó que su departamento trabaja desde hace meses en un nuevo decreto de vigilancia en salud pública que «incremente la calidad de las notificaciones» y «agilice la intervención de las administraciones sanitarias» en aquellas enfermedades de declaración obligatoria. Asimismo, trasladará al Consejo Interterritorial de Salud una propuesta para «mejorar la sensibilidad del sistema» y el protocolo para la listeria.
Según los últimos datos ofrecidos por la Junta, el brote está ya «en remisión», aunque un nuevo caso confirmado a última hora eleva ya la cifra de afectados a 206 en Andalucía y 214 en toda España. No se tiene constancia de pacientes que hayan consumido los productos contaminados después del 23 de agosto. Lo cierto es que las muestras remitidas al laboratorio nacional de referencia confirman que dos de los casos producidos en marzo se corresponden con la cepa detectada en los productos de la empresa Magrudis. De ahí que, como señaló el consejero andaluz de Salud, Jesús Aguirre, se esté analizando ahora «desde cuándo viene, cuándo llegó a Magrudis y desde cuando está circulando esa cepa en Andalucía».