La UE no se pone de acuerdo en un plan conjunto para combatir el virus, ayudar a los países más afectados y ejecutar la compra unificada de test, respiradores y equipos de protección
29 mar 2020 . Actualizado a las 09:16 h.La pandemia global del coronavirus vuelve a poner encima de la mesa la desunión europea de los 27 cuando toca tomar decisiones de calado más allá de las finanzas o las cumbres comunitarias. Esta emergencia sanitaria revela las diferencias entre la Europa del norte y la del sur y deja en entredicho una mínima coordinación de la UE ante la rápida expansión de una pandemia procedente de China que muy pocos quisieron ver cuando el régimen dictatorial lanzó la voz de alarma con casi dos meses de retraso.
Se echa de menos una planificación conjunta desde Bruselas para combatir el virus y ejecutar la compra unificada de test, respiradores y equipos de protección sanitaria. Todo saltó por los aires esta semana cuando el ministro neerlandés de Finanzas sugirió una investigación a España e Italia por no contener el coronavirus.
Portugal apoya A España
«Re-pug-nan-te». Así respondió el primer ministro de Portugal, António Costa, al ministro neerlandés de Finanzas, Wopke Hoekstra, que sugirió una investigación a España e Italia por no tener recursos presupuestarios suficientes para contener la pandemia, pese a que la zona euro lleva siete años de crecimiento ininterrumpido. «Ese discurso es repugnante en el marco de la UE. Esa es la expresión adecuada: re-pug-nan-te», dijo Costa, que añadió que «no fue España quien creó el virus ni fue España quien lo importó; el virus infelizmente nos atrapa a todos por igual. Si no nos respetamos todos, los unos a los otros, y si no comprendemos que ante un desafío común tenemos que responder en común entonces nadie ha comprendido lo que es la UE».
Cumbre fallida
Alemania y Holanda rechazan el «plan Marshall» y aplazan 15 días la reunión. El pasado jueves la esperada cumbre europea sobre el coronavirus se saldó con un choque frontal entre los países partidarios del «plan Marshall» de reactivación económica -que propuso el presidente español, Pedro Sánchez- y los que se oponen a compartir los costes de una emergencia sanitaria jamás vivida, con Alemania y Holanda a la cabeza. Lo sorprendente es que el Eurogrupo ha aplazado 15 días la reunión para atajar un plan de reactivación de la economía europea en plena emergencia sanitaria que deja miles de muertos cada día en el continente. Otra prueba más de la sonrojante lentitud de la maquinaria de la UE para goce y disfrute de los euroescépticos.
Advertencia de Francia
«No superaremos esta crisis sin una fuerte solidaridad europea». El presidente francés, Emmanuel Macron, expresó ayer que no se podrá superar la crisis del coronavirus «sin una fuerte solidaridad europea, a nivel sanitario y de presupuesto», en respuesta a las preguntas por escrito planteadas por los diarios italianos La Stampa, La Repubblica y Corriere della Sera sobre el bloqueo de Holanda y Alemania. Denunció que «algunos países actúan como si Italia o España fueran responsables de ello y son, por el contrario, las primeras víctimas de este virus que no perdona a nadie». «No quiero una Europa egoísta y dividida», expresó Macron, dejando caer que también detesta una UE de dos velocidades, la de los países ricos y pobres.
El problema sigue
Inacción ante el brutal impacto económico del coronavirus. Mientras Bruselas se entretiene estos días pidiendo a plataformas on line pruebas de cómo combaten la desinformación sobre el coronavirus o lanzando una campaña para promover actividades culturales durante el confinamiento que mantiene en casa a gran parte de la población de la UE, el tiempo pasa y el problema de fondo sigue sin resolverse. La inacción desde la Comisión Europea y el Consejo Europeo para atajar ya esta pandemia desespera a los países del sur, que están convencidos de que el brutal impacto económico acabará sintiéndose en toda la UE. Alemania y Holanda prefieren que cada país afronte el batacazo del virus con sus propios medios y empujan a España e Italia a recurrir al fondo de rescate -conocido como el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE)- obviando que la recesión afectará de lleno a los 27.