Aseguran que una sola dosis estándar de la vacuna tiene una eficacia del 76 por ciento en la protección contra el covid-19 sintomático durante los primeros 90 días después de la vacunación
03 feb 2021 . Actualizado a las 11:33 h.Investigadores de la Universidad de Oxford han publicado en Preprints de The Lancet un análisis de datos adicionales de los ensayos en curso de su vacuna contra el covid-19, desarrollada conjuntamente con la compañía farmacéutica AstraZeneca.
Además, los autores dan las primeras pistas sobre el potencial de la vacuna para reducir la transmisión del coronavirus: han observado una reducción del 67 por ciento en los contagios después de la primera dosis en los voluntarios de sus ensayos en Reino Unido.
Hasta la fecha se han publicado muchos datos sobre la eficacia de las vacunas para evitar la enfermedad, pero todavía se desconoce si impiden que los vacunados se infecten y sean contagiosos de manera asintomática.
Por otra parte, en su trabajo revelan que la eficacia de la vacuna es mayor a intervalos más largos de refuerzo, y que una sola dosis de la vacuna es un 76 por ciento eficaz desde los 22 hasta los 90 días después de la vacunación.
En este preimpreso, que está actualmente en revisión por The Lancet, informan sobre un análisis de datos adicionales para incluir la información del ensayo hasta el 7 de diciembre de 2020, que incluye otros 201 casos de COVID-19 sintomático primario (332 casos de los 131 notificados anteriormente). Así, señalan que el efecto del intervalo de dosificación en la eficacia es pronunciado, con una eficacia de la vacuna que aumenta del 54,9 por ciento con un intervalo de menos de seis semanas al 82,4 por ciento cuando se separan 12 o más semanas.
También detallan que una sola dosis estándar de la vacuna tiene una eficacia del 76 por ciento en la protección contra el covid-19 sintomático durante los primeros 90 días después de la vacunación, una vez que el sistema inmunitario ha creado esta protección 22 días después de la vacunación, y la protección muestra pocos indicios de disminución en este periodo.
«Estos nuevos datos proporcionan una importante verificación de los datos provisionales que fueron utilizados por más de 25 reguladores para conceder la autorización de uso de emergencia de la vacuna. También apoyan la recomendación para adoptar un intervalo de refuerzo de 12 semanas, ya que buscan el enfoque óptimo para el despliegue, y nos asegura que las personas están protegidas desde 22 días después de una sola dosis de la vacuna», ha resaltado el jefe de los ensayos, el profesor Andrew Pollard.
De esta forma, los análisis presentados en este trabajo sugieren que es el intervalo de dosificación y no el nivel de dosificación lo que tiene un gran impacto en la eficacia de la vacuna. «Esto está en consonancia con investigaciones anteriores que apoyan una mayor eficacia con intervalos de cebado más largos realizados con otras vacunas como la de la gripe, el ébola y la malaria», apunta Pollard.
Los investigadores esperan publicar datos relativos a la eficacia de su vacuna en las nuevas variantes del virus «en los próximos días», y esperan que los resultados sean «muy similares a los ya comunicados por otros desarrolladores de vacunas».
Por su parte, el ministro británico de Sanidad, Matt Hancock, tildó este miércoles de «absolutamente magníficos» los resultados de un estudio preliminar que muestra que la vacuna desarrollada por la universidad de Oxford y AstraZeneca es «efectiva» para reducir la propagación del coronavirus.
El estudio, elaborado por la citada universidad británica y cuyos hallazgos aún no han sido publicados de manera formal, parece corroborar que «las vacunas son la solución para salir de esta pandemia», en palabras del titular.
Esos resultados también sugieren que el preparado podría tener un efecto «sustancial» en la transmisión del virus pues implican que cada persona vacunada protegerá de manera indirecta al resto.
En declaraciones al canal británico Sky News, Hancock también afirmó que esos resultados respaldan de manera «categórica» la estrategia del Gobierno británico de administrar ambas dosis de la vacuna con 12 semanas de diferencia.
Ese planteamiento busca ofrecer cierta protección contra el virus al mayor número de posible personas antes de completar y extender la inmunidad con una segunda dosis.
«El informe de la universidad de Oxford representa una muy buena noticia, apoya la estrategia que hemos adoptado y muestra al mundo que la vacuna de Oxford funciona de manera efectiva», manifestó el ministro a la cadena británica Sky News.
.
También reduce el número de asintomáticos
Hancock agregó que, según esto, el preparado de Oxford/AstraZeneca «no solo reduce las hospitalizaciones sino también el número de personas que padecieron el covid-19, incluso de manera asintomática en unos dos tercios».
El político tory se refirió asimismo a las recientes mutaciones del virus y adelantó que el organismo regulador del Reino Unido podría aprobar por la vía rápida cambios en las vacunas para adaptar los preparados a las nuevas variantes del coronavirus.
«Estamos trabajando con las empresas sobre su desarrollo y a fin de asegurarnos de que son reguladas y se emplean de manera más rápida que la primera vez, ya que se trata de un simple ajuste de la vacuna en lugar de una vacuna completamente nueva», explicó.