Los chicos practican más «sexting» y las chicas el cibercontrol a su pareja
SOCIEDAD
Cuatro investigadoras gallegas crean un plan educativo contra el acoso sexual físico o virtual
03 feb 2022 . Actualizado a las 17:46 h.¿Saben lo que es el sexting, la sextorsion, el grooming o el ciberstalking? Pues pregúntele a alguno de los adolescentes de su entorno; posiblemente no solo conozcan su significado en la teoría. El acoso sexual es una realidad que Internet ha convertido en algo cotidiano y, contra eso, la medida más inteligente es formar a los más jóvenes para que sepan detectarlo. Así lo aseguran Alba Adá, Yolanda Rodríguez, Rosana Martínez y Patricia Alonso. Son cuatro investigadoras gallegas, doctoras en Psicopedagogía, Educación Social y Periodismo, que acaban de publicar Ni on, ni off, un programa orientado a profesores y padres para ayudarles a educar frente al acoso, tanto en el plano físico como en el virtual.
«Es fundamental que se implemente dentro de los colegios una educación formativa sobre cómo podemos vivir en un mundo digital de forma segura. Los peligros que hay no van a desaparecer y no podemos hacer nada para que las personas más jóvenes no tengan acceso a ese peligro; así que lo que hay que hacer es que lo sepan identificar», resume Alba Adá Lameiras.
Aunque las mujeres son las víctimas mayoritarias de este tipo de prácticas, también se están convirtiendo en acosadoras. «Habitualmente los chicos son los que ejercen más acoso sexual callejero, en los espacios públicos, y en la dimensión online ellos son más de sexting, mientras que son las chicas las que se están convirtiendo en más cibercontroladoras, sobre todo de sus parejas o chicos sobre los que tienen interés», dice Yolanda Rodríguez. Esta es una de las realidades detectadas por las investigadoras a través de un estudio que están realizando con financiación del Ministerio de Ciencia e Innovación en el que analizan el acoso sexual a través de los comentarios sobre el cuerpo.
Pero ¿qué lleva a las adolescentes de hoy a ejercer ese doble papel de agresoras y víctimas? Según Rodríguez, la actitud de las chicas esconde el temor a perder su posición, no tanto a título personal, sino social. «Es el miedo a perder ese estatus de ‘ser novia de'. Porque ‘ser novia de' les da un halo de protección dentro del grupo de iguales. Tienen bajo nivel de autoestima, se sienten menos seguras y el hecho de que tengan pareja parece que las coloca dentro de una posición y les otorga una protección», explica.
Trabajar sobre estas conductas es, según las investigadoras, esencial para frenar el problema del acoso sexual -sea cara a cara o virtual- y el sufrimiento anímico, mental y físico que acarrea. Ese es el objetivo que persiguen con este programa que les gustaría que estuviese integrado en una educación sexual reglada. Algo que no existe. «A pesar de que hay una nueva ley educativa, nuevamente se deja la educación sexual en manos de la transversalidad, de darla dentro de otras materias; algo que ya sabemos que no ha funcionado», lamenta Yolanda Rodríguez.