¿Por qué es tan difícil predecir el tiempo?

SOCIEDAD

El matemático Edward Lorenz
El matemático Edward Lorenz MIT

La naturaleza caótica de la atmósfera dificulta mucho pronosticar su evolución más allá de dos días

31 ene 2023 . Actualizado a las 15:58 h.

Los meteorólogos no tienen una profesión sencilla. Suelen ser el blanco de las críticas en cuanto un pronóstico falla. Y teniendo en cuenta la influencia del tiempo en nuestras vidas, pues suelen ser frecuentes, a menudo desmesuradas y en la mayoría de los casos completamente injustificadas. En España incluso hay presidentes de comunidad que cargan contra ellos y les piden «rigor». Sin embargo, a todo el mundo se le olvida con demasiada frecuencia que no es culpa de los profesionales de la predicción, sino de la propia naturaleza de la atmósfera.

En 1961 el científico estadounidense Edward Lorenz trataba de encontrar una forma de aplicar las matemáticas a la atmósfera con el objetivo de anticipar su evolución. Es decir, ofrecer un pronóstico del tiempo. Para ello, introdujo en un ordenador información numérica sobre variables como temperatura, humedad, presión y viento y comprobó los resultados. Después repitió el experimento, pero descubrió que el resultado era completamente diferente. Y lo único que hizo fue redondear las cifras, es decir, tenían unos cuantos decimales menos. Lorenz descubrió así cómo pequeñas modificaciones producen cambios enormes. Fue entonces cuando formuló la Teoría del Caos y pronunció su famosa frase «el aleteo de una mariposa en Brasil puede desatar un tornado en Texas». 

La atmósfera es un sistema no lineal que depende mucho del estado inicial. Sin embargo, como es imposible tener la información de todas las variables meteorológicas de la Tierra en un momento concreto, cualquier dato que no se haya tenido en cuenta puede modificar la previsión. De ahí viene que la meteorología sea una ciencia tan compleja. Actualmente la fiabilidad de un pronóstico ronda el 95 % de acierto a 24 horas y se va reduciendo drásticamente a medida que pasan los días, siendo a partir del quinto día casi nula.

Todo se complica además en las latitudes medias, donde se encuentra Galicia. En las regiones templadas hay mucha variabilidad atmosférica que introduce más incertidumbre. Además, hay épocas más complicadas que otras. En primavera y otoño resulta más difícil afinar el pronóstico porque son estaciones en las que coinciden masas de aire frío polar y cálido subtropical que alimentan a las borrascas y a los anticiclones. 

También hay fenómenos más complicados de predecir. Por ejemplo, un huracán es un enorme sistema de bajas presiones que se puede observar perfectamente con la ayuda de los satélites y alertar a la población. Con los tornados esto no se puede. Únicamente se anticipan las condiciones que pueden dar lugar a la formación de uno. Los tornados suelen generarse a partir de enormes nubes de tormentas, alguna llamadas supercélulas. Cuando en el radar aparecen este tipo de estructuras los meteorólogos lanzan un aviso, que suele producirse solo unos minutos antes de que su formación. 

Así que si quiere enfadarse cuando la lluvia le fastidie algún plan, no lo haga desde luego con los meteorólogos, ni siquiera con aplicaciones móviles, ya que se basan en los modelos de predicción numérica. En la actualidad el mejor modelo meteorológico por su precisión y fiabilidad es el del centro europeo ECMWF. Hágalo en todo caso con la atmósfera ya que le encanta el caos y los cambios de última hora.