Reino Unido ha sido el último en mandar desintalar la aplicación móviles gubernamentales. Estados Unidos amenaza con vetarlo si no se desvincula de su matriz China
20 mar 2023 . Actualizado a las 08:22 h.Desde que comenzó el año, algunos gobiernos, organismos e instituciones han dado un golpe sobre la mesa restringiendo el uso de la aplicación TikTok. Comenzaron a finales de febrero la Comisión Europea, el Consejo de la Unión Europea y el Parlamento Europeo, ordenado a todo su personal que eliminase la aplicación de los dispositivos corporativos, incluidos teléfonos móviles, tabletas y computadoras. Al otro lado del charco, la Casa Blanca daba 30 días a sus trabajadores para que desinstalaran la red de vídeos breves de cualquier soporte gubernamental. Días después se sumaba el Gobierno de Canadá, que además bloqueaba la posibilidad de descargar la red en un futuro.
Al efecto dominó se sumaron países como Bélgica, Dinamarca, Letonia, Lituania y Reino Unido. El último en anunciarlo ha sido Nueva Zelanda, que lo prohibirá a partir del 31 de marzo. Días atrás, el secretario de Estado de Seguridad, Tom Tugendhat, demandaba al Centro Nacional de Ciberseguridad que revisara la aplicación para asegurarse de que no representaba una amenaza. El punto común es que todos destacaban motivos de seguridad entre las razones que habían motivado la decisión. En particular, con respecto a la protección de datos —la geolocalización, por ejemplo— y a su recopilación por parte de terceros. En Estados Unidos, Paul Nakasone, director de la Agencia de Seguridad Nacional, expresó ante el Comité de Fuerzas Armadas del Senado su preocupación «por la información que tiene, su algoritmo y su influencia».
Compañía china
Para comprender el problema, hay que fijar el foco en China. ByteDance, empresa matriz de TikTok y gigante tecnológico, tiene su sede allí. Es una compañía con una estructura corporativa opaca y aunque en el 2021 se reorganizó convirtiendo a TikTok en una unidad independiente, todavía existen dudas sobre la legislación que respetan. En China todas las empresas, incluidas las tecnológicas, están obligadas por las leyes de seguridad a compartir los datos de sus usuarios o clientes con el Gobierno. Es decir, que los datos que recoge la red pueden ser reclamados por cualquier departamento.
Por esto, los comunicados de las organizaciones que decidían prescindir de la aplicación ponían el foco en que pudiera publicar y almacenar datos confidenciales de los usuarios en manos del Gobierno chino. «TikTok no solo está asociada directamente al Partido Comunista Chino, sino que ha sido usada para espiar a los estadounidenses», escribió el legislador republicano Ken Buck en su cuenta de Twitter. Este, junto al republicano Josh Hawley, presentó un proyecto de ley para prohibir TikTok desde cualquier dispositivo estadounidense.
Pero, realmente, ¿puede un gobierno prohibir una aplicación? Medios como The Wall Street Journal y The New York Times aseguran que la administración de Biden habría exigido a TikTok que, para seguir funcionando en territorio estadounidense, tendría que dejar de operar con su empresa y vender su participación. Por ahora, todas las prohibiciones se han dado en organismos que tienen el poder de veto. Solo un país del mundo, India, impidió en el 2020 el uso de la plataforma, entre otras muchas aplicaciones chinas, alegando cuestiones de seguridad.
La defensa de TikTok
TikTok, por su parte, ha negado todas las acusaciones. «Creemos que esta prohibición se ha basado en conceptos erróneos fundamentales y está impulsada por una geopolítica más amplia, en la que TikTok y nuestros millones de usuarios no juegan ningún papel», dijo un portavoz del servicio cuando se prohibió en los órganos gubernamentales del último país de la lista, Reino Unido.
Recientemente, Theo Bertram, vicepresidente de Políticas Públicas y Relacionales Gubernamentales de TikTok, negaba que la empresa fuera china. «El Gobierno chino nunca nos ha pedido datos y, si lo hiciera, nos negaremos», aseguró. En esta ocasión, aparte de resaltar su propiedad internacional, también ha recordado que tanto el código como el algoritmo de la red social como la compañía y los equipos son distintos en China, en Estados Unidos y Europa.
