San Xoán se reivindica como la gran fiesta de Galicia

Candela Montero Río
Candela Montero Río REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Cada ciudad, barrio, aldea e incluso casa particular celebró la tradición que marca el pistoletazo de salida a las fiestas del verano

24 jun 2023 . Actualizado a las 09:58 h.

El tiempo acompañó -los termómetros no bajaron de los 20 grados durante la madrugada en la fachada atlántica- y Galicia celebró la primera fiesta del verano: las llamas características de la noche de San Xoán ardieron por toda la comunidad. Siguiendo la tradición, después de la sardiñada y la queimada, tocó saltar las hogueras que estuvieron encendidas hasta el amanecer, cuando llegó el momento que cumplir con el último ritual para espantar a los malos espíritus: lavarse la cara con el ramo de San Xoán.

A CORUÑA

El encendido de la falla, coronada por el sabio Arsenio Iglesias a la vera del templo de Riazor, fue como el estallido de una juerga con mayúsculas que para los más sanjuaneros comenzó ya el miércoles pasado, tomando posiciones en la playa que más se ilumina de fuego, postal fija de cada madrugada de 23 de junio e icono fotográfico de una ciudad que respira San Xoán por los cuatro costados. 

Amanecieron los arenales plagados de tiendas de campaña de jóvenes dispuestos a madrugar para defender su parcela a orillas del Atlántico. Sin tienda y apiñados entre un revoltijo de mantas y toallas, se desesperezaban Letizia, Giovanni, Alberto y sus amigos, estudiantes italianos de Erasmus. «Pasamos una noche algo dura, con mucho frío, mucha humedad... Pero tenemos mucha expectación, esperemos que valga la pena». Todo apuntaba a que sí, al menos por la afluencia. A media mañana, ya no cabía ni un alfiler en la ensenada, llena de hooligans de la cita con el fuego más multitudinaria, colorida e intergeneracional con la que dar la bienvenida al verano. La mayoría locales, pero también muchos aterrizados de otras latitudes. Hasta en velero llegaron algunos y muchos se estrenaban convocados por el seguro de fiesta de la noite meiga coruñesa. Como el valenciano Salva, Gabriele y Nino, de Italia y Miguel, de México, que excavaron un cráter para hacerse una mesa de arena a la espera de la noche. «En Valencia también celebramos el San Juan, pero esto es otra cosa, no tiene nada que ver», comentaba el levantino. 

A medida que subía el sol, que también se alió y llevó el mercurio hasta los 27, los sanjuaneros achicaron espacios para hacer hueco a los bañistas hasta la hora del reparto de maderas, que trajo cola, literalmente, en el paseo. 

Mientras, en los otros escenarios multitudinarios comenzaron a montarse parrillas y barras de bar. La calle San Juan volvió a hacer honor a su nombre, y también la plaza de Vigo y Pardo Bazán reventaron de gente, olor a sardinas y churrasco. Como Los Rosales o Os Mariñeiros, el barrio de las Flores… Difícil caminar o moverse sin embriagarse de las ganas de vivir, compartir y quemar. Ya con el paseo marítimo abarrotado, los Celtas Cortos sonando de fondo, y los fuegos artificiales rivalizando con las llamas, A Coruña encendió la noche y, un San Xoán más, volvió a echar las meigas fóra.   

Costa da morte

La Costa da Morte se tiñó de humo de un extremo a otro. A las nueve de la tarde, en la playa Area da Vila de Camariñas, donce presumen de hacer «a maior lumarea de Galicia», ya había en torno a mil personas. «Está aquí todo o pobo e aínda falta xente por vir», comentó Encarna Liñeiro. «As sardiñas están riquísimas!», aseguró. En Carballo, la gente hacía colas en la zona del Rego da Balsa para degustar hasta pulpo á feira mientras las bombas de palenque anunciaban el comienzo de una noche mágica. En el barrio de San Cristovo, grandes grupos de jóvenes rodeaban las cachelas. «Aquí vívese con moita ilusión», expresó Milena Varela. Son las fiestas patronales. En otros puntos como Salto, en Vimianzo, la asociación Neira Marcos preparaba las parrillas. «Para nós é unha data moi especial porque nos xuntamos todos os veciños», dijo Rocío, de 49 años. Virginia fue la encargada de realizar la queimada, pero todos se saben la receta después de tantos años celebrando juntos esta jornada.

En los principales focos de actividad respectaron la tradición y no fue hasta la medianoche cuando prendieron la llama. Antes, pronunciaron los conjuros oportunos. Las buenas temperaturas incluso hicieron más larga la velada y fueron muchos los que demoraron el salto a la hoguera. Dos fueron las cachelas más destacadas por su originalidad. En Camariñas recrearon el HMS Serpent, el navío que dio origen al Cemiterio dos Ingleses. En Carballo, apostaron por plasmar el skyline de la localidad.

 

SANTIAGO

Cuando el sol todavía mandaba en el cielo, en Santiago las sardinas ya formaban parte de las tapas y menús de establecimientos hosteleros y de puestos en la calle en un casco histórico lleno tanto de turistas como de compostelanos dispuestos a disfrutar del San Xoán. Era el aperitivo para las sardiñadas que luego acompañarían a las cacharelas en barrios y calles, que se hacían esperar hasta el anochecer.

Porque la actividad de esta jornada mágica en Santiago, donde la noche estuvo iluminada por una treintena de hogueras públicas y más de 500 en zonas privadas, comenzó temprano. Desde las 17.00 horas hubo propuestas en la Praza de Mazarelos, con un festival que se va asentado y en donde muchos turistas conocían esta tradición y no dudaban en portar las distintas hierbas mágicas para espantar los espíritus y tampoco en seguir con sus móviles el conjuro da queimada y gritar «¡Viva o San Xoán!». Incluso algunos visitantes se atrevieron a aprender a tocar una muiñeira con la pandereta y echarse un baile tradicional.

Los primeros que comenzaron a saltar sobre el fuego fueron los más pequeños de la casa. Ya antes de las ocho de la tarde se convirtieron en protagonistas sobrepasando una hoguera de pequeñas dimensiones en la plaza Salvador de Parga. «É unha maneira de introducir aos nenos na tradición. Para eles é unha festa», apuntaba uno de los organizadores después de acompañar a su hijo de tres años. Porque el San Xoán es una tradición que no entiende de edad. Lo demostraba Luis que, a sus 86 años, no dudó en acercarse para seguir los preparativos en el barrio de San Pedro, uno de los principales puntos de referencia en la ciudad, puesto que a los vecinos se le unen compostelanos de otros puntos conocedores del buen ambiente y reparto de sardinas, así como los turistas, ya que se encuentra en pleno Camino Francés.

A MARIÑA

Burela celebró por todo lo alto este viernes, 23 de junio, el San Xoán Castrexo. Una celebración que aúna la parte tradicional de la considerada como «noche más mágica» del año con la Festa Castrexa que en los últimos años tuvo un gran éxito en este municipio mariñano. Cerca de las nueve de la noche, la organización ultimaba la preparación de alrededor de 100 kilos de sardinas asadas y otros tantos de churrasco. El apartado musical comenzó con el concierto de A Banda da Loba, y se prolongará, en torno a la medianoche, cuando se procederá al encendido de la hoguera, con foliada, queimada, orquesta y un disyóquei, entre otros.

Sardinas y churrasco en Burela
Sardinas y churrasco en Burela Xaime Ramallal

 

Ferrol

Desde las 19.00 horas las sardinas ya se degustan en barrios como Canido, Esteiro o el de San Xoán. A las 23.00 está previsto que se encienda la gran luminaria. Además, otros escenarios de la comarca son también protagonistas de la celebración, como la playa de A Magdalena (Cabanas).

Vigo

Miles de personas han acudido a las «cacharelas» más famosas y multitudinarias de la provincia, con bañador, pico y pala. «Festa rachada» en los arenales de Praia América y Panxón, donde la organización estaba preparada para recibir hasta más de 60.000 personas y, a la vista de la ingente cantidad de grupos organizados que, al cierre de esta edición, ya tenía sus hogueras preparadas, parece que las estimaciones no se iban a equivocar mucho aunque la afluencia el año pasado, tras dos años de parón, se quedó por debajo de las 30.000 personas que se habían congregado en el 2019. La llegada de los asistentes ayer fue más paulatina y madrugadora debido a las altas temperaturas y a coincidir en viernes por lo que, a media tarde la zona de Praia América ya estaba tomada por un ejército de jóvenes que comenzaban a disfrutar de la celebración. Mientras unos apuraban los últimos rayos de sol para remojarse, los grupos y peñas trabajaban para preparar sus propias trincheras y fogatas. La fiesta del fuego purificador llegó acompañada de mucha música porque en Panxón se celebran las fiestas de San Xoán durante tres días y, antes de prender las hogueras a medianoche, ya sonaba la música de los grupos América y Metrópolis. El Concello mantiene activa la campaña San Xoán sen lixo, que ha cosechado buenos resultados en ediciones anteriores consiguiendo reducir al máximo el impacto en el entorno.

Sardiñada en O Berbés
Sardiñada en O Berbés Xoán Carlos Gil

LUGO

El buen tiempo animó a los vecinos de la ciudad a llenar las calles de los diferentes barrios o reunirse en sus casas. La Policía Local autorizó un total de 381 solicitudes para hacer hogueras. Teniendo en cuenta las que quedaban por tramitar, se organizaron unas 400. Las más grandes fueron las de Montirón, San Fiz o A Piringalla. El número de hogueras es parecido al del año pasado. Fogatas, queimadas populares y música animal el ambiente en la ciudad. Más allá de honorar al patrón, otros concellos como A Fonsagrada, Meira, Láncara, Pol, A Pastoriza, Guitiriz Vilalba o Muras también se unieron a la tradicional celebración.

Arousa

Centenares de hogueras iluminan la noche de la comarca. Aquí, la capital de San Xoán es Vilagarcía, donde el Concello ha registrado cerca de 300 peticiones para hacer cachadas. La zona donde más hay, como viene siendo habitual es la de la playa. Se han registrado 21 permisos para los arenales de A Concha, Compostela y A Covacha, en Carril.

Con información de las delegaciones de La Voz de Galicia.