La política, antes de Vox y que se presentó recientemente con el partido Caminando Juntos, estaría saliendo con un músico vigués
01 ago 2023 . Actualizado a las 14:43 h.El amor es inesperado, insospechado y entiende a veces poco de ideologías. Al menos en teoría, que ya la práctica y la vida diaria es otra cosa. Y buen ejemplo de ello es el nuevo romance que habría iniciado la política Macarena Olona, que formó parte de las filas de Vox y ahora lidera el partido Caminando Juntos. Se rumorea que ha encontrado el amor en Galicia, concretamente en Vigo, de la mano de un músico vigués llamado David Romero.
Lo llamativo es que las ideas de Romero son diametralmente opuestas a las de Olona. Él se declara «republicano, feminista y antifascista» y es muy activo en Twitter bajo el nombre de @Davizz66, y ella no ha logrado sacar representación con su nuevo partido. Eso sí, el lema de Caminando juntos es «ciudadanos valientes de todas las ideologías, unidos en la defensa de nuestras libertades individuales y la igualdad de todos los ciudadanos». El caso es que tras su abrupta salida de Vox, Olona, de 43 años, decidió hacer el Camino de Santiago donde reiteró sus problemas médicos.
Sea cierta o no su relación, el caso es que el Twitter de Olona está plagado de fotos suyas juntas, algunas de ellas que darían pie a pensar y asegurar que lo suyo es algo más de una amistad.
Por el momento ninguno de los dos ha confirmado que entre ellos exista una relación, pero desde luego sí que hay una estrecha amistad.
David Romero saltó a la fama el pasado mes de febrero cuando confesó a la revista YES, de La Voz de Galicia, que alquilaba su piso en el centro de Vigo por 500 euros, una cifra baja para un mercado de alquiler por las nubes desde hace un tiempo. «Son ochenta metros, tiene tres habitaciones, un baño y una terraza. Lo reformé yo entero. La cocina tuve que financiarla porque no me llegaba el dinero. Y está completamente nueva», aseguraba. Ahí revelaba este músico y aficionado a la pesca submarina que tiene una hija, que que decidió invertir en este inmueble para dejarle un legado. «Lo compré cuando murió mi madre, hace cuatro años. Somos cinco hermanos y vendimos el piso de ella. A mí me tocó una quinta parte. Unos 40.000 euros, más o menos. ¿Y qué hice con ese dinero? Pues busqué un piso porque si no lo inviertes, te lo acabas gastando», aseguraba.
Desde hace tres años nunca les ha subido el alquiler a sus inquilinos, Nerea (con la que posaba en la foto) y Christian. «¿Qué pasa? Que la del piso que compré se paga sola y por eso lo hice también. Y, ¿por qué no quiero ganar más dinero? Porque así me llega. Yo lo que quiero es que esta gente tenga un proyecto de vida y pueda vivir. Son menores de 30 años, son jovencitos y son encantadores. Además son dos currantes», afirmando que no busca especular con el alquiler y apelaba a la conciencia social.