Rodrigo Nogueira, el donjuán de Marín «bajito y sin dientes» que estafó a más de cien mujeres

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

Rodrigo Nogueira, el donjuán de Marín
Rodrigo Nogueira, el donjuán de Marín

Telecinco estrenó este miércoles «La caza del encantador», un documental que narra la lucha de las víctimas contra el estafador del amor gallego

07 sep 2023 . Actualizado a las 13:05 h.

«Es bajito y sin dientes, pero te cautivan otras cosas de él». Esa era la sorprendente descripción que daban algunas de sus víctimas cuando el caso salió a la luz en La Voz hace ya más de siete años. El verdugo, un gallego conocido como el donjuán de Marín. Su nombre real, Rodrigo Nogueira.

Uno de los estafadores del amor más conocidos del país volvió este miércoles a la actualidad. Telecinco emitió el primero de un especial de dos capítulos titulado «La caza del encantador».

Presentado por Joaquín Prat, el espacio se centró en los métodos de conquista de este gallego, hasta dónde pudo llegó y cómo conseguía captar a sus víctimas. La docuserie reconstruye incluso la investigación llevada a cabo por las propias afectadas y también las secuelas que sufren. «El documental desgrana la lucha de las víctimas por conseguir la primera sentencia condenatoria para este tipo de delitos», explica la promoción de Mediaset. 

La perfecta personalidad

Algunos testimonios apuntan a que este gallego de 47 años podría llevar dos décadas engañando a mujeres, pero que fueron las redes sociales las que le dieron el escenario perfecto. Rodrigo Nogueira Iglesias acudía a estas plataformas y a las webs de citas donde empleaba perfiles falsos en los que simulaba «ser distintas personas con diferentes nombres y profesiones». Y todo con el objetivo inicial de llamar la atención de las potenciales víctimas.

Roi, como lo conocen en su localidad natal, Marín, se hizo pasar por chef de alta cocina, tatuador, técnico de una importante compañía tecnológica, hacker y un largo etcétera de oficios. 

Un pasado dramático

Al comenzar las pesquisas, los investigadores constataron que, una vez que conseguía ganarse la confianza de la víctima, Nogueira adoptaba la personalidad más adecuada y se desplazaba por todo el territorio nacional para quedar con las chicas personalmente e iniciar una relación sentimental. Habitualmente, el donjuán rodeaba la historia de su vida de un pasado dramático en el que sus padres o hermanas habían fallecido en un accidente, habían sido víctimas de la droga o incluso estaban afectados por una terrible y larga enfermedad.

 Las víctimas

Si en algo coinciden las víctimas es en que el donjuán de Marín se convertía en el novio perfecto. Algunas se enamoraron. Otras lo denominaron «enganche», pero lo cierto es que tras esa conexión emocional llegaba el momento en el que Nogueira comenzaba a pedirles dinero u otros objetos de valor «que nunca reintegraba». Incluso se generaban escenarios en los que las víctimas acababan comprándole ropa o pagándole el alquiler. Además, el estafador conseguía simultanear varias relaciones. Normalmente se excusaba en que le había surgido algún viaje de trabajo para poder moverse de un sitio a otro. Poco a poco los desplazamientos se incrementaban hasta que, un buen día, desaparecía de sus vidas.

El detalle del físico

«Es una persona muy fotogénica y sabe muy bien cómo venderse ante la cámara. En las fotos que él te manda, sí es un chico con cierto atractivo, está bastante bien, pero cuando lo ves en persona... Yo me quedé, es que no puede ser el mismo. No vas a ser una persona que solo va por el físico y lo conoces y, aunque no te guste en un primer momento, porque es bajito y sin dientes, te cautivan otras cosas de él», explicaron las víctimas en diferentes reportajes publicados por La Voz y firmados por Alfredo López Penide. Y es que una cosa era la imagen del joven en las redes y otra la realidad.

La plataforma

Toda su fachada comenzó a desmoronarse cuando un grupo de víctimas se constituyeron en plataforma. Su unión permitió que se conocieran nuevos casos y que muchas mujeres se sintieran arropadas al comprobar que no eran las únicas engañadas. Al tiempo que interponían denuncias, sacaron a la luz sus experiencias para seguir desenmascarándole. 

Estafadas y consecuencias

En el año 2018, la Policía Nacional aseguraba que, aunque era imposible de calcular porque muchas víctimas no denunciaban por vergüenza, Nogueira podría haber estafado a más de cien mujeres. 

Su primera condena llegó en el año 2017: dos años de prisión por un delito continuado de estafa a una mujer de Vizcaya que le prestó dinero y a la que sustrajo desde un ordenador a un móvil. 

En el 2018 fue condenado por estafar a una joven y a su madre en Bilbao.Tras ese golpe judicial, las condenas no pararon de sucederse.