Calafell, el primer municipio que derriba parte de su paseo marítimo por la crisis climática

redacción REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Ayuntamiento de Calafell

Ha iniciado las obras para devolver el espacio robado a la playa y protegerse mejor frente a los temporales, que son cada vez más intensos por el cambio global

10 ene 2024 . Actualizado a las 18:58 h.

El Ayuntamiento de Calafell (Tarragona) se ha convertido en el primer de España en demoler parte de su paseo marítimo por la crisis climática. Se ha visto obligado a deconstruirlo para conectar dos tramos y ganar espacio para las playas debido al impacto en la fachada litoral de los temporales, cada vez más violentos por el cambio climático.

El ministerio para la Transición Ecológica, mediante el Servicio de Costas del Estado, realiza y financia esta actuación, que introduce un cambio de estrategia contra los efectos del cambio climático en la fachada litoral.

Las obras durarán unas semanas y su presupuesto es de 80.000 euros. Este importe corresponde a una primera fase de deconstrucción, que afecta a la zona más afectada por los temporales de mar y que implicaba incluso un posible riesgo. Es, por tanto, una actuación de emergencia. La superficie que se retira es de unos 800 metros cuadrados, del total de 8.000 que tiene la plaza.

No se descarta seguir actuando en el espacio, según la evolución de la situación, ya que este es un punto crítico de la erosión que el mar produce en nuestro litoral. A partir de aquí, habrá que realizar un rediseño de este espacio. El Ayuntamiento ha anunciado que el paseo marítimo propiamente dicho seguirá existiendo, con un diseño u otro, pero que es necesario reformarlo para que la playa sea más resiliente.

El concejal de Ecología Urbana, Aron Marcos, explicó que «la deconstrucción estaba prevista hace tiempo para ayudar a estabilizar este tramo de costa que, prácticamente, no tenía arena».

«Este es un punto crítico —añadió—, porque se escenifican todos los problemas que, a día de hoy, tiene el litoral. Demasiadas infraestructuras, una falta de sedimento considerable, paseos que han quedado junto al mar». A su juicio, «la mayor parte de dolores de la costa que sufrimos ahora van asociados a cómo se ha organizado el litoral en las últimas décadas. Pero el cambio climático hará que todo vaya a peor: tendremos más temporales, más frecuentes y más virulentos, que afectarán a un enfermo, a las playas, que ya está crítico».

«El escenario del cambio climático nos obliga a pensar a 50 años vista, pero a adaptarnos a ellos desde ya mismo», concluye el concejal. El de Calafell no será el último caso.