El centro de bajas presiones complicará el tiempo sobre todo este miércoles, cuando se espera una jornada «muy desagradable»
15 ene 2024 . Actualizado a las 17:04 h.Se fue Hipólito, y llega Irene. La borrasca con este nombre entra este martes por Galicia desde el suroeste, por lo que se espera una jornada dominada por las nubes y las precipitaciones.
La nueva borrasca, según informa Meteogalicia, se situará entre las Azores y la península Ibérica, por lo que la atmósfera seguirá muy inestable. El cielo estará cubierto en toda la comunidad, con lluvias que por momentos serán persistentes y de intensidad moderada, aunque con pausas entre precipitaciones. Las temperaturas no tendrán cambios muy significativos, con valores por tanto elevados durante la mañana, pero con poca oscilación térmica durante el día. Las máximas alcanzarán los 18 grados en muchos puntos de Galicia, mientras que la mínima más fría prevista será la de Lugo, con 11 grados. Los vientos del sur aumentarán en intensidad y soplarán en general con fuerza a partir del mediodía.
Pero lo peor de Irene se hará sentir mañana. El centro de las bajas presiones estará muy cerca de Galicia durante este día, por lo que el tiempo será «muy desagradable». El cielo en general estará muy nublado y las lluvias se presentarán con frecuencia, alcanzando en ocasiones fuerte intensidad. Las temperaturas bajarán uno o dos grados, y se espera que los vientos soplen fuertes del suroeste durante todo el día, con rachas muy fuertes en el litoral y zonas altas del interior durante la segunda mitad del día.
El jueves será una jornada de transición en la que se dejará notar una leve influencia anticiclónica a medida que avance el día. Es decir, amaneceremos con lluvias que irán disminuyendo a lo largo de la mañana. Las temperaturas seguirán la senda descendente, que se notará más en las mínimas.
Esta influencia anticiclónica se quedará en Galicia, previsiblemente, durante el viernes y el sábado, dos jornadas en las que las lluvias remitirán parcialmente y se podrá ver a ratos la luz del sol. Pero el espejismo será pasajero, porque, si se cumplen las predicciones, el viento el domingo volverá a cambiar al suroeste, y las borrascas volverán a entrar de nuevo en la comunidad.
Galicia registró este año el otoño más cálido y lluvioso de la serie histórica, según confirmó el informe climatológico de MeteoGalicia. El período se caracterizó por temperaturas elevadas, especialmente en octubre, que fue un mes «extremadamente cálido». En cuanto a las precipitaciones, el pasado fue un otoño extremadamente lluvioso tras registrar, en las dieciséis estaciones que componen la serie regional, una media acumulada de 797 litros por metro cuadrado, lo que representa un 93 % más que lo establecido en el período de referencia.
Por el momento, casi a punto de cumplir un mes de invierno, se puede decir que la tendencia en cuanto a humedad y lluvias, de momento se mantiene.