Los gallegos que esperan a ser trasplantados caen a mínimos históricos

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Foto de archivo de un congreso de cirujanos, con el funcionamiento de una máquina trasplantes en Palexco
Foto de archivo de un congreso de cirujanos, con el funcionamiento de una máquina trasplantes en Palexco ANGEL MANSO

En el año 2023 hubo más de un centenar de donantes; el más mayor tenía 85 años

17 ene 2024 . Actualizado a las 16:08 h.

A 31 de diciembre de 2023 había 216 gallegos esperando un trasplante. Se trata de la cifra más baja desde que hay registros, la mitad que hace diez años, cuando se registraban 425. Es uno de los datos del balance de donación y trasplantes que ofrecieron los responsables de la Consellería de Sanidade, en el que también destaca la tasa de negativas de las familias, de un 15,5 %, casi tres puntos inferior a la estatal y la segunda más baja de la estadística gallega.

Marisa López, directora de ADOS, la Axencia de Doazón, detalló la actividad registrada el año pasado, con 109 donantes, una cifra inferior a los 128 del 2022. Galicia está por encima de las recomendaciones de la OMS con 40 donantes por millón de habitantes y la edad media de estas personas se situó en los 60 años el pasado año. El más mayor tenía 85, destacó López. 

Ya desde hace años, y afortunadamente, la principal causa de muerte de los donantes no son los siniestros de tráfico sino los accidentes cerebrovasculares, y ha habido un incremento de las patologías neurodegenerativas. Los dos hospitales gallegos que realizan trasplantes, el Chuac y el CHUS, realizaron en el 2023 un total de 331 intervenciones, frente a las 296 del 2022. De ellas 168 fueron trasplantes de riñón, 88 de hígado, cuatro de páncreas, 22 de corazón y 49 de pulmón. Suben en todos los órganos menos en el caso del corazón, en donde se hicieron menos operaciones. 

A lo largo de 42 años de actividad en Galicia más de 9.500 gallegos salvaron sus vidas gracias a un trasplante, la mayoría, 4.951, gracias a la donación de un riñón. En cuanto a los pacientes que siguen esperando, de los 216 un total de 149 aguardan un trasplante de riñón, 22 de pulmón, otros 22 de hígado, 14 de corazón y nueve de páncreas. 

Encarnación Bouzas, coordinadora autonómica de trasplantes, asegura que cuando se produce una negativa familiar a la donación suele ser porque desconocen la voluntad del fallecido, «por iso facemos fincapé en que se lle diga ás familias». El director xeral de Asistencia Sanitaria, Jorge Aboal, insistió en este argumento de «verbalizar, planificar a morte», más allá de tener la tarjeta de donante o el registro de instrucciones previas.