Condenan por pornografía infantil al periodista estrella de la BBC, que elude la cárcel

Íñigo gurruchaga COLPISA

SOCIEDAD

ZUMA vía Europa Press | EUROPAPRESS

El reconocimiento de culpa y el remordimiento expresado evitan la cárcel a Huw Edwards, que fue el encargado de dar la noticia de la muerte de la reina Isabel II

17 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

 Huw Edwards, el periodista mejor pagado de la BBC y cronista de grandes eventos, como el funeral de la reina Isabel II y la coronación de Carlos III, ha sido condenado a seis meses de prisión, suspendidos durante dos años, por la recepción de imágenes de actos sexuales entre menores que pidió a un hombre de 25 años condenado por pederastia, entre diciembre de 2020 y agosto de 2021.

La autodestrucción de Edwards, un veterano presentador de programas informativos, reconocido por la BBC y su audiencia, comenzó el pasado año cuando se desveló que había mantenido una relación amistosa con un joven a quien le pedía imágenes sexuales suyas. El joven se negó a acusar de ningún delito y la investigación policial llegó a la conclusión de que no se habían cometido.

Fue apartado de las pantallas por el ente público de radiotelevisión, pero en noviembre fue detenido por la posesión de múltiples imágenes-377, de las que 41 son clasificadas como indecentes. En la vista de este lunes, la Fiscalía afirmó que Edwards respondíó positivamente a una oferta de su suministrador para enviarle imágenes sexuales de un adolescente de edad entre los 14 y los 16 años.

Rehabilitación

En otro momento, le pidió que no le enviase más imágenes ilegales tras recibir varias de Categoría A, las más graves, con niños de 13 y 15 años. Otro niño tenía entre 6 y 9 años. A cambio de los envíos, Edwards, que llegó a tener un salario de unos 500.000 euros, enviaba a su cómplice dinero para pagar los costes de la universidad.

El juez Goldspring redujo la pena habitual por el reconocimiento de culpa de Edwards, su «remordimiento profundo», los factores de su quebrada salud mental y el informe psiquiátrico que afirma que hay un riesgo de suicidio, porque cree que su familia- su esposa y sus cinco hijos- vivirían mejor si él pone fin a su vida. Pidió perdón al tribunal y a las víctimas. El juez aceptó que Edwards, de 63 años, no presenta un riesgo al público y podría rehabilitarse.