Una treintena de padres dan una paliza a una profesora en Italia incitados por rumores no confirmados sobre abusos sexuales
SOCIEDAD
La docente descubrió a un alumno fumando en los baños, lo que propició su expulsión. Al día siguiente, comenzó a circular por las redes y chats de padres el testimonio de una madre señalándola por acoso a los menores. No hay denuncias ni informes que lo respalden
18 nov 2024 . Actualizado a las 17:20 h.El pasado jueves, una treintena de padres irrumpieron en un colegio de la localidad italiana Castellammare di Stabia, a las afueras de Nápoles, y propinaron una paliza a una de las profesoras, provocándole un traumatismo craneoencefálico. Su padre, que acudió al centro en su ayuda, también resultó herido, con una muñeca rota. La entrada del instituto Salvati amaneció este lunes escoltada por varios carabinieris, cuya presencia fue solicitada por la dirección de la escuela para evitar un nuevo episodio violento.
El ambiente está crispado; el personal docente, conmocionado por lo ocurrido. La profesora agredida descubrió el lunes de la semana pasada a un alumno fumando en los baños, lo que propició su expulsión. Al día siguiente, una madre hizo circular por redes sociales y chats de padres un mensaje en el que aseguraba que la mujer había abusado sexualmente de cinco estudiantes. De momento, no hay denuncias interpuesta ni informes de los servicios sociales que confirmen o desmientan esta acusación.
Los padres —hasta una treintena— optaron, sin embargo, por tomarse la justicia por su propia mano y en pleno horario lectivo acudieron en masa a ajustar cuentas con la profesora, allanando las instalaciones educativas y atacándola frente a unos 140 estudiantes atónitos. Golpes y bofetadas, insultos y amenazas de muerte. La mujer tuvo que ser socorrida por la policía. «El episodio atestigua la barbarie de una sociedad cada vez más violenta, que necesita recuperar los valores de la convivencia civil», reaccionó el ministro italiano de Educación, Giuseppe Valditara, a través de su cuenta de X.
La profesora lleva tiempo en el punto de mira de las familias. El pasado agosto alguien hackeó sus redes sociales y durante semanas ha estado recibiendo amenazas. Al investigar qué había provocado la ira desenfrenada de los padres, la policía dio con el post viral que contiene las graves acusaciones, por el momento, infundadas; ahora intenta averiguar si se trata de un complot que involucra la difusión de rumores para desacreditarla o si hay algo de cierto en lo que se dice de ella. Los agentes han revisado su móvil y los teléfonos de los alumnos y, por ahora, no han encontrado nada que la señale, ni mensajes ni vídeos.
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Tal y como recoge Il Corriere della Sera, la directora del centro, Donatella Ambrosio, espera que esta historia pueda arrojar luz también sobre el contexto social en el que cada día los empleados del centro desempeñan su trabajo, que ayude a comprender que no es fácil trabajar en un barrio como Scanzano. «Se trata de zonas difíciles y a menudo deterioradas. Hay que esperar las investigaciones, a que la justicia siga su curso. El juez escuchará a los niños y veremos qué responden. Pero nos sentimos derrotados», manifestó Donatella Ambrosio.