Cae un anillo del cielo de 500 kilos en Kenia y nadie es capaz de explicar su origen
SOCIEDAD
Ocurrió en la localidad de Mukuku, y aunque la agencia espacial del país africano creyó inicialmente que era parte de un cohete, ni su peso ni su tamaño coinciden con esta teoría. Diez días después no existe una versión oficial de lo ocurrido
09 ene 2025 . Actualizado a las 18:12 h.A las tres de la tarde del pasado 30 de diciembre, un anillo metálico de 500 kilos de peso y con dos metros y medio de diámetro «reentró» en un bosque de la localidad de Mukuku, en Kenia. La agencia espacial del país africano emitía entonces un comunicado, el único hasta el momento proveniente de fuentes oficiales de este fenómeno, en el que indicaba que «las evaluaciones preliminares indican que el objeto caído es un anillo de separación de un vehículo lanzador (cohete). Estos objetos suelen estar diseñados para arder cuando vuelven a entrar en la atmósfera terrestre o para caer sobre zonas desocupadas, como los océanos. Se trata de un caso aislado, que la Agencia investigará».
Así se pretendía dar carpetazo a un asunto que ha asombrado a los lugareños y generado ya gran revuelo mediático. ¿Por qué? Porque esa explicación no resuelve el misterio en absoluto. Y es que ningún cohete fue lanzado cerca de Kenia en fechas próximas a la aparición. Así, aunque suelen ser habituales estos desprendimientos, que acaban desintegrándose en la atmósfera o caen, pero en áreas deshabitadas o en los océanos, no es aplicable a este extraño suceso. Eso acota las posibilidades a tan solo una: un objeto que estaba en órbita en el espacio reentró a la Tierra sobre el país africano. Por eso, se multiplican las teorías de a qué tipo de objeto, por ahora no identificado, pertenece el gigantesco círculo metálico.
Las teorías del astrofísico Jonathan Mc Dowell
El astrónomo británico-estadounidense del Centro Harvard-Smithsonian Jonathan McDowell, analizó en su blog Planet 4589, las posibilidades más plausibles sobre lo ocurrido.
En su estudio, descartó dos de las hipótesis y principales rumores que circularon en los últimos días por redes sociales
- Satélites de Starlink: Aunque cuatro satélites de la constelación Starlink reingresaron a la atmósfera terrestre ese mismo 30 de diciembre: Starlink 1538 (lanzado en agosto de 2020); Starlink 2115 (en enero de 2021); Starlink 2351 (en marzo de 2021); y Starlink 4785 (septiembre de 2022), ni los horarios de las reentradas ni las áreas que sobrevolaron en su descenso coinciden con el anillo encontrado en Kenia. Además, estos sistemas satelitales no emplean este tipo de anillos.
- Un cohete indio: También el 30 de diciembre la agencia espacial india realizó una misión llamada SPADEX para probar el acoplamiento de pequeñas naves. En la maniobra se empleó un cohete lanzado desde la isla de Sriharikota, pero despegó cuatro horas después del hallazgo en Kenia.
El anillo, que sigue analizándose, también podría corresponder con un avión o tener un origen industrial terrestre, sin embargo, para McDowell, el fenómeno puede corresponderse con misiones espaciales antiguas:
- Pieza de una cohete antiguo: Se trataría para el experto de la etapa Centaur AC-167 del cohete Atlas II, que en agosto de 2004 lanzó un satélite espía para la Oficina Nacional de Reconocimiento de Estados Unidos (NRO). Según la Fuerza Espacial de Estados Unidos, la etapa Centaur reingresó a la atmósfera el 30 de diciembre de 2024 por la noche, pero varias horas después de que se encontrara el anillo en Kenia. Sin embargo, se plantea la posibilidad de que una parte del cohete se desprendiera con antelación y reingresara sobre África. Aunque el tamaño coincide, los 500 kilos estimados serían superiores al peso real de la etapa.
- Un mecanismo usado en el lanzamiento de satélites: La hipótesis más convincente para McDowell es que el anillo podría ser el adaptador de carga del cohete Ariane 5, utilizado en julio de 2008 para lanzar los satélites Protostar 1 y Badr 6. Aunque la etapa superior del lanzador europeo es demasiado grande para coincidir con el anillo, con un diámetro de 5,5 metros, el adaptador de carga Sylda, un mecanismo diseñado para el despliegue de múltiples satélites, sí tiene un diámetro aproximado de 2,5 metros idéntico al del hallazgo en el país africano.
Pese a este estudio de McDowell, la investigación sigue en marcha, sin que nadie haya ofrecido más explicaciones sobre lo ocurrido.