La tasa de aumento del año pasado fue de 0,59 centímetros, cuando la prevista era de 0,43
24 mar 2025 . Actualizado a las 09:20 h.El nivel del mar global subió más rápido de lo previsto en el 2024, principalmente debido a la dilatación del agua del océano a medida que se calienta, un fenómeno denominado expansión térmica. Según un análisis dirigido por la NASA, la tasa de aumento del año pasado fue de 0,59 centímetros, cuando la prevista era de 0,43 centímetros.
«El aumento que observamos en el 2024 fue mayor de lo esperado», afirmó en un comunicado Josh Willis, investigador del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, en el sur de California. A lo que añadió que «cada año es un poco diferente, pero lo que está claro es que el océano continúa subiendo, y la tasa de aumento es cada vez más rápida».
En los últimos años, aproximadamente dos tercios del aumento del nivel del mar se debió a la incorporación de agua terrestre al océano mediante el derretimiento de las capas de hielo y los glaciares, mientras que el tercio restante provino de la expansión térmica del agua de mar. Sin embargo, en el 2024, estas contribuciones se invirtieron, y dos tercios del aumento del nivel del mar provinieron de la expansión térmica.
«Con el 2024 como el año más cálido registrado, los océanos de la Tierra en expansión siguen su ejemplo, alcanzando sus niveles más altos en tres décadas», afirmó Nadya Vinogradova Shiffer, jefa de los programas de oceanografía física y del Observatorio Integrado del Sistema Terrestre en la sede de la NASA en Washington.
Desde que se inició el registro satelital de la altura del océano en el 1993, la tasa de aumento anual del nivel del mar se ha más que duplicado. En total, el nivel del mar global ha subido diez centímetros desde la década de los 90. Esto se ha medido a través de una serie ininterrumpida de satélites de observación oceánica, que comenzó con TOPEX/Poseidon en el 1992.
El calor se filtra al océano de varias maneras, lo que provoca la expansión térmica del agua. Normalmente, el agua de mar se organiza en capas determinadas por su temperatura y densidad. El agua más cálida flota sobre ellas y es más ligera que el agua más fría, con mayor densidad. En la mayoría de los lugares, el calor de la superficie se mueve muy lentamente a través de estas capas hacia las profundidades del océano.
Sin embargo, las zonas oceánicas con mucho viento pueden agitar las capas lo suficiente como para provocar una mezcla vertical. Corrientes muy fuertes, como las del Océano Antártico, pueden inclinar las capas oceánicas, lo que facilita que las aguas superficiales se deslicen hacia las profundidades.
El movimiento masivo de agua durante el fenómeno El Niño (FEN) —evento climático en el que una gran masa de agua cálida, normalmente ubicada en el Océano Pacífico occidental, se desplaza hacia el Pacífico central y oriental— también puede provocar un movimiento vertical de calor dentro del océano.